Tengo la impresión que Neil Gaiman hace muchos años que no publica historias nuevas. En cómic, estoy casi seguro. Sus últimos trabajos publicados en castellano son antologías que recopilan relatos breves, la mayoría de ellos escritos hace más de una década y, como excepción, su decepcionante visión de la mitología nórdica. En el caso de los cómics la cosa no mejora: hay muchos títulos recientes con el nombre de Gaiman en la portada, pero todos son adaptaciones al cómic de alguno de sus (excelentes) relatos breves. Pero, insisto, es una impresión e invito a quien sepa más que yo a que me corrija.
En estas historias siniestras y originales encontramos un mundo raro y sutilmente interrelacionado conextrañas enfermedades venéreas, una espeluznante anciana que come carne cruda, un hombre obsesionado con una modelo de una revista pornográfica y una historia dentro de otra historia sobre fantasmas.
Muchos son los dibujantes que han recorrido al trabajo del cuentacuentos Neil Gaiman para inspirarse, copiar, homenajear, adaptar o colaborar, con mayor o menos fortuna. Desde John H. Williams III o P. Craig Russell en “The Sandman”, Gabriel Bá y Fábio Moon en “Cómo hablar con chicas en fiestas“, Charles Vess en “Stardust“, Jill Thompson en “El libro de cuentos de los pequeños Eternos“, Colleen Doran en “El puente del troll” y “Nieve, cristal, manzanas” o John Bolton en “Corazón de Arlequín“, entre muchos otros, destacando por encima de todos ellos la prolífica relación con su colega y viejo amigo Dave McKean. O estas “Historias probables” (“Likely Stories“) que reseñamos aquí, una antología con cuatro historias fantásticas en las que Neil Gaiman colabora con el dibujante Mark Buckingham. No es la primera vez que trabajan juntos, ya que el artista principal de “Fábulas” ya dibujó el “Miracleman” de Neil Gaiman y a finales de los años noventa colaboraron en varios proyectos.
Es un hecho contrastado, con numerosos premios, críticas efusivas y miles de ejemplares vendidos, que el escritor de Porchester es un maestro del relato breve y, para quienes no conocen aún toda su obra, cualquiera de sus antologías de relatos es un sorprendente cajón de sastre que recoge relatos breves e historias cortas, cuentos y poesías, pequeñas bromas y homenajes, dedicatorias y secuelas. En el caso de las cuatro historias de “Historias probables“, originalmente vieron la luz en varias antologías de relatos (en “Humo y espejos” y “Objetos frágiles“) y luego tuvieron una adaptación en formato televisivo en 2016 como una miniserie de cuatro episodios titulada “Neil Gaiman’s Likely Stories“, dirigidos por Iain Forsyth y Jane Pollard (que también son responsables de la banda sonora, junto a Jarvis Cocker de la banda Pulp) para Sky TV en la que el propio Neil Gaiman aparece en cada uno de los episodios como si fuese Alfred Hitchcock. Y ahora en forma de novela gráfica, publicada en inglés por Dark Horse Comics y en castellano por Planeta Cómic.
Como es habitual en su prolífica obra, el novelista, escritor, guionista, poeta y cuentacuentos Neil Gaiman en las cuatro historias de “Historias probables” nos ofrece un billete de ida y vuelta a un mundo de fantasía muy personal, inclasificable e inimitable, que seduce tanto como sorprende, un universo propio extraño y desosegante pero, a la vez, cotidiano, cercano y un punto nostálgico, cargado de un oscuro sentido del humor y, sobre todo, de una imaginación desbordante y fuera de lo común. Todas ellas están ambientadas en Londres, en un pequeño y escondido pub nocturno llamado Club Diógenes donde se desarrolla el prólogo y epílogo de las historias, y que tienen como protagonistas a unos extraños personajes, desde un hombre obsesionado con una mujer que nunca envejece o un tipo que sufre de una enfermedad vergonzosa hasta una siniestra anciana que come carne cruda, que viven en un mundo en el que se mezclan elementos reales y fantásticos, de manera que cuesta definir donde acaba uno y empieza el otro.
En “Buscando a la chica” (“Looking for the Girl“) intentaremos comprender quién es esa mujer de belleza inmortal que arrebata la cordura a los hombres que la retratan desde tiempos inmemoriales. En “Partes foráneas” (“Foreign Parts“) descubriremos que una enfermedad venérea puede ser una verdadera historia de terror. “Alimentadores y alimentados” (“Feeders and Eaters“), una historia de antropofagia y vampirismo, nació en realidad como una tira cómic que Neil Gaiman y Mark Buckingham escribieron para un editor de Reino Unido a principios de los años noventa, pero nunca llegó a publicarse. Cuando Neil la rehízo como una historia en prosa algunos años después la enriqueció, le dio forma y profundidad, lo cual abrió nuevas posibilidades narrativas que algunos años después ha servido para que Mark Buckingham vuelva a dibujarla. Y “Hora de cierre” (“Closing Time“), ganador de un premio Locus en 2004 al mejor relato corto, es un viaje a la juventud del narrador, una historia dentro de otra como si fuese una ‘matrioska‘, un cuento cargado de miedos infantiles con su dosis justa de fantasmas y casas encantadas.
Neil Gaiman es uno de los autores fundamentales en ViaNews. Su prolífica obra nos cautiva y nos tiene robado el corazón con ese universo tan particular, inclasificable e inimitable, que está habitado por gente común pero que se encuentra a un solo paso de un mundo paralelo oscuro y terrible, al que se llega a través de un umbral mágico y escondido. En esta ocasión esta puerta tiene forma de pub, un lugar extraño situado sobre una tienda de discos en un callejón estrecho que daba a Tottenham Court Road. Bienvenidos al Club Diógenes y a sus “Historias probables“. Bienvenidos al universo particular de mi escritor favorito.
Historias probables
Autores: Mark Buckingham y Neil Gaiman
Traducción: Diego de los Santos
Fecha de publicación: Enero de 2022
ISBN: 978-84-1112-015-9
Formato: 16,8×25,7cm. Cartoné. Color.
Páginas: 88
Precio: 16,95 euros
Pues yo recuerdo está película con mucho cariño. Quizás no llegue al nivel de Toy Story o Gremlins pero... ¿qué…