Un trabajo muy sucio nos devuelve al mejor Christopher Moore, un autor que gracias a su humor ha conseguido convertir en legión a sus lectores mutados ahora en perfectos fans que esperan, esperamos, con ansía sus siguientes trabajos.
La Factoría de Ideas nos presentó a Moore con su novela El ángel más tonto del mundo, título que podéis encontrar en edición de rústica o de bolsillo y que ya reseñamos hace unos meses, y tras el apabullante éxito de éste libro se apresuraron a publicar Un trabajo muy sucio, un libro que, a mi entender, supera ampliamente a su antecesor.
En Un trabajo muy sucio nos encontramos con Charlie Asher, un macho beta (la definición de los “machos beta” ya es de por sí hilarante) que acaba de ser padre… y viudo al mismo tiempo. No contento con esas desgracias, y fortuna, el destino le reserva a Charlie otra tarea: convertirse en La Muerte… bueno, en una de Las Muertes. De ahora en adelante su misión en la vida, además de ser padre y dueño de una tienda de objetos de segunda mano, será la de hacerse con las almas de los difuntos para garantizar la migración de las almas a otros cuerpos, en otras palabras: la reencarnación. Y más le vale hacer bien su trabajo porque hay unos seres extraños y amenazantes que también desean hacerse con esas almas para un propósito mucho menos noble; la destrucción de la Tierra y de la vida como la conocemos.
Christopher Moore es un autor que encandila, si bien tuve algún pequeño reparo con El ángel más tonto del mundo, no he tenido ninguno con Un trabajo muy sucio, la mezcla de ternura, tristeza, amor, desesperación y humor que impregnan este libro me ha conquistado al 110%. Ver cómo es capaz de reflejar y plasmar la agonía de Charlie ante la muerte de su esposa, a la vez que la ternura y amor que siente hacia su hijita, Lily, es una de las grandes bazas de esta novela, así como el modo en el que Charlie acepta su condición como Muerte, perdón, una de las Muertes. El humor con el que hace frente a situaciones imposibles y escalofriantes que no pueden sino recordarnos a Rincewind demuestran que Moore es devoto admirador de Mundodisco y un fiel seguidor de la prosa de Terry Pratchett, lo que no deja de ser una buena noticia, porque es un seguidor avanzado que, con sólo dos libros publicados en España, apunta maneras muy prometedoras.
Estoy encantado con que La Factoría apueste por otros géneros ya que, gracias a esa apuesta, se nos ha permitido conocer a autores como Moore que, a finales de año, verá publicada su tercera novela en español, ¡Chúpate esa!, una novela en la que, en esta ocasión, retrata el mundo de los vampiros desde el humor, pero con los pies en un mundo loco como este en el que vivimos.
Pero estábamos hablando de Un trabajo muy sucio, un auténtico bet-seller de La Factoría que ya está en su quinta edición, gozando de un amplio éxito, merecido, sin duda.
En definitiva, Un trabajo muy sucio es un libro hilarante pero que, además, nos ofrece un Apocalipsis, varias Muertes, una niñita con extraños poderes, un sinfín de desternillantes personajes y situaciones y una más que agradable lectura. Para mi no hay duda alguna, tenéis que leer este libro.
A ver, la de abogados cristianos (me la agarras con la mano) me parece tan estúpido... en fin, además ahora,…