A medio camino entre “Los juegos del hambre“, “Mad Max 3” y “Rollerball“, “Mecánica Celeste” de Merwan es un cómic que sorprende, por encima de todo, por su brillante representación de las escenas de acción y competición de un deporte imaginario, que da título al cómic, que es una versión post-apocalíptica del clásico “balón prisionero” de toda la vida.
En un mundo postapocalíptico, no lejos de la ciudad de Fontainebleau, Aster sobrevive en los límites de la ciudad agrícola de Pan con la ayuda de su amigo Wallis. El frágil equilibrio de la comunidad cambia con la llegada de un emisario de la poderosa República Militar de Fortuna, que exige el apego de Pan a Fortuna, así como un alto tributo de comida so pena de invadir su ciudad por la fuerza. De espaldas a la pared, en un extraño campo de juego, los habitantes de Pan confían su suerte en la misteriosa Mecánica Celeste para arbitrar su destino.
La mecánica celeste es una rama de la astronomía, una ciencia que se encarga de estudiar los movimientos de los cuerpos celestes. El alemán Johannes Kepler fue el primero en desarrollar las leyes que rigen las órbitas a partir de observaciones empíricas del movimiento y por eso es muy reconocida la mecánica celeste de Kepler, que es la primera que dedujo el movimiento de los astros del Sistema Solar, y que afirmó que los planetas se desplazaban en su órbita alrededor del Sol formando una elipse. Su modelo cosmológico se puede encontrar en las páginas de “Mysterium Cosmographicum“, del año 1596, y sus famosas tres leyes se incluyen en “Astronomia Nova” de 1609.
“Mecánica Celeste” (“Mécanique Céleste“) es un cómic escrito y dibujado por el francés Merwan Chabane, publicado originalmente en francés por Dargaud en septiembre de 2019, que nos traslada a un futuro distópico cercano en el que el planeta ha sufrido algun tipo de catástrofe que ha dejado las tierras anegadas, contaminadas y aisladas. En este mundo post-apocalíptico los hombres y las mujeres se han organizado para sobrevivir, y la comunidad de Pan es un ejemplo perfecto de como el ser humano tiene una gran capacidad de adaptación y de supervivencia ante las catástrofes. Resiliencia, le llaman a eso. Cerca de la ciudad de la ciudad francesa de Fontainebleau, los habitantes de Pan se han organizado para seguir adelante, ajenos a lo que ha sucedido con el resto del planeta más allá de las aguas profundas, cosechando arroz y recuperando herramientas del fondo de las aguas que cubren su mundo. El frágil equilibrio de la comunidad de Pan entra en crisis con la llegada de unos extranjeros armados, emisarios de la ciudad de Fortuna (y de Ceres, de incógnito), que exigen la adhesión de la comunidad y someterse a su liderazgo. Solamente hay una vía de escape, un peculiar sistema de arbitraje llamado “Mecánica Celeste“.
Jugando con el concepto del movimiento de los planetas que hemos comentado al principio, Merwan Chabane propone en este cómic un nuevo y imaginativo deporte que es una variación del clásico juego de matar conejos, o de balón prisionero: dos equipos de siete jugadores, un terreno de juego variable y un montón de balones. El objetivo de esta competición llamada Mecánica Celeste consiste en tocar a todos los jugadores del equipo rival con una pelota para eliminarlos y ganar la partida. Y es este arbitraje entre Pan y Fortuna mediante el juego de la Mecánica Celeste, al mejor de tres partidas y en una competición que enfrenta a un David contra su Goliat particular, sobre el que Merwan centra toda la atención del cómic hasta la última página, ignorando las causas de la catástrofe que sirve de contexto apra la función, la aparente relación bíblica entre Aster y el territorio de Ceres, en el periplo de Juba en Fortuna, la relación de Wallis y Aster, sin profundizar de forma crítica en las interesantísimas sociedades post-apocalípticas de Pan, Ceres o Fortuna, y sus distintos modelos de organización y modelo, ni en la opresión de las clases dominantes y las relaciones tirantes entre comunidades, e ignorando también lo que sucede después, en un final precipitado y algo pobre que desmerece el brillante trabajo precedente.
Aunque ya lleva diez cómics publicados con Glénat y Dargaud, los inicios creativos de Merwan Chabane están ligados a los videojuegos y a los guiones de series de dibujos animados, empezando por la buena acogida de su proyecto final en la Ecole de l’image Gobelins, el multipremiado cortometraje de animación “Biotope“. Y de los proyectos audiovisuales saltó al mundo del cómic con “Fausse Garde” en 2009, para seguir después con “El oro y la sangre” con Fabien Nury, Maurin Defrance y Fabien Bedoue o “Por el Imperio” con Bastien Vivès. Esta experiencia en la animación se puede apreciar perfectamente en las escenas de acción de “Mecánica Celeste“, donde el autor expresa de forma brillante, con los planos adecuados y una composición de viñetas bien escogida, la agilidad de los personajes que compiten en el juego, el movimiento de la pelota y las maniobras de los jugadores de ambos equipos sobre el terreno de juego. No hay confusión alguna. Todo es intuitivo, claro, preciso y con un ritmo rapidísimo que permite leer el cómic en un abrir y cerrar de ojos.
Nuevo Nueve nos trae esta historia de anticipación que explora las luces y las sombras de las competiciones deportivas en un formato espectacular, de gran tamaño, que hacer lucir “Mecánica Celeste” de forma excepcional y ofrece un contenedor a la altura del magnífico trabajo de Merwan.
Mecánica Celeste.
Autor: Merwan
ISBN: 978-84-17989-47-7
Formato: 30x22cm. Cartoné. Color
Páginas: 200
Precio: 28,00 euros
Curioso porque justo ahora ando enganchado a la trilogía de los Arquitectos... y en cuanto acabe con ella iré a…