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Es indiscutible que George Lucas recogió numerosas influencias y referencias para dar forma a su “Star Wars” y que la saga galáctica tiene un montón de deudas, algunas de las cuales nunca se han saldado. Y de entre todas ellas, sin la menor duda, la más grande de todas es la que George Lucas tiene con Akira Kurosawa y “La fortaleza escondida“, la gran y confesa inspiración de “Star Wars: Una nueva esperanza” y también de alguna escena de otras películas de “La Guerra de las Galaxias”.

Además de las obvias influencias del género ‘jidai-geki‘, como que los samuráis, sus largas katanas y su estricto código de honor es el espejo en el que se reflejan los Jedi de “Star Wars“, es un hecho que George Lucas tomó la película de Akira Kurosawa como base para la suya, de principio a fin: “La fortaleza escondida influyó en Star Wars desde el principio. Estaba buscando una historia. Tenía algunas escenas pero no conseguía una trama básica. Después pensé en La fortaleza escondida, que había visto en 1972 o 73, así que la primera trama era más o menos la misma“, declaró el propio Lucas. Dicen que George Lucas se planteó incluso comprar los derechos para hacer un ‘remake’ oficial, pero con las sucesivas reescrituras del guión la historia se fue desviando lo suficiente como para no tener que hacerlo.

Escrita y dirigida por Akira Kurosawa en 1958, protagonizada por Toshirô Mifune, Minoru Chiaki, Takashi Shimura, Susumu Fujita y Misa Uehara, “La fortaleza escondida” (“Kakushi-toride no san-akunin“) cuenta la historia de Yuki, una altiva princesa que, tras la guerra, ha de atravesar junto a su fiel general tierras enemigas. Escoltada por Matashichi y Tahei, dos soldados desertores y acompañada por su general Rokurota Makabe, deberá dejar atrás sus ropajes nobles, hacerse la muda y vivir numerosas aventuras. Si consiguen cruzar territorio enemigo y llegar a una provincia aliada estarán a salvo.

Las similitudes entre “Star Wars: Una nueva esperanza” y “La fortaleza escondida” son numerosas. Se detectan influencias (por usar una palabra inocua) en su argumento, el estilo narrativo, las transiciones (las cortinillas), algunas escenas (el duelo entre Obi-Wan Kenobi y Darth Vader es muy similar al de Rokutora con Takodoro), los personajes (la princesa Yuki y Leia podrían ser hermanas, Matashichi y Tahei tienen un rol cómico como C3PO y R2D2,…) o incluso el final (la princesa, sana y salva y ya con ropajes nobles, engalana a los héroes por su ayuda y valentía), pero eso nos debe servir para poner en valor la película de Kurosawa, un film excepcional que ofrece al espectador una dosis de aventuras, acción y humor.

George Lucas pagó su deuda con Akira Kurosawa cuando, el 27 de marzo de 1990, con 81 años de edad, le entregó el Premio Óscar honorífico a toda su trayectoria​ junto a Steven Spielberg.

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