“Insexts” es un cómic de horror-feminista-victoriano, una categoría en la que encontraremos pocos exponentes, pero que Marguerite Bennett y Ariela Kristantina saben trabajar con mimo y precisión para ofrecer un resultado final más que digno.
Insexts 1 El despertar
Edición original: InSexts Volume 1: Chrysalis USA
Fecha de edición: abril de 2019
Guión: Marguerite Bennett
Dibujo: Ariela Kristantina
Color: Bryan Valenza y Jessica Kholine
Formato: Libro cartoné, 168 págs. a color.
14,95€
En el ocaso de un siglo, un par de vengativas arpías victorianas descubren un poder horripilante que las transforma en unas nuevas criaturas extrañas y vigorosas. Armadas con su tétrica apariencia en constante evolución, descienden a un mundo de sofisticación y ocultismo, con nuevos sentidos y una sensualidad renovada, decididas a forjarse una nueva vida para ellas y para su bebé, fruto de su amor.
Planeta Cómic continúa publicando los títulos más destacados de AfterShock Comics, la nueva editorial que nos viene sorprendiendo muy gratamente con títulos como Jimmys Bastards, Animosity o Shipwreck y que ahora nos da a probar una mezcla de horror victoriano con toque lésbico y feminista que, poco a poco, se irá desarrollando para convertirse en una especie de Buffy Cazavampiros en pleno Londres de finales del XIX. Pero rebobinemos.
Lady Bertram, y su amante Mariah, conspiran para acabar con el marido de la primera, un maltratador de libro al que para colmo ampara la sociedad de la época, gracias a las artes mágicas, pero el resultado de este conjuro hará que ambas desarrollen una serie de poderes místicos y a la par adquieran la capacidad de convertirse en una suerte de insectos monstruosos de grandes fauces (nada que sorprenda demasiado por aquí, a fin de cuenta el título “Insexts” es un juego de palabras entre “insects” y “sex”). Después de acabar, bestialmente, con el marido de Lady Bertram recogen los frutos de su acción: un bebé nacido del amor de ambas mujeres y gestado en el cuerpo del marido que acaba por explotar (sí, Insexts es un poco gore) para “dar a luz” a un bebé, por otra parte, aparentemente normal.
Desde ese momento Lady Bertram y María cumplen el periodo de luto (antiguamente había que encerrarse en casa, correr las cortinas, vestir de negro… en fin, leed La casa de Bernarda Alba para haceros una idea) y se reintegran en la sociedad londinense mientras siguen viviendo su amor prohibido (con escenas muy explicitas) aunque la existencia del Carnicero de Londres les preocupará, especialmente por la nueva afición de Lady Bertram de acabar con violadores y asesinos, lo que inevitablemente planteará ciertas dudas sobre si no será ella la culpable, a la par que atraerá a otro justiciero paranormal.
Ya conocemos a Marguerite Bennett, por su trabajo en Animosity, y a Ariela Kristantina, por su paso por Lobeznos (Marvel), pero ahora nos toca ver cómo trabajan juntas y la verdad es que el resultado de Insexts es realmente atractivo (y no lo digo por las escenas de sexo perfectamente recreadas) con una potente corriente de feminismo que empodera a las mujeres y que se alza sobre todo el horror conjugado por Bennett en Insexts y que demuestra que, si tenemos el estómago preparado para el gore, seremos capaces de apreciar.
En cuanto al trabajo de Ariela Kristantina, antes de entrar al meollo habría que comentar que el color inicial de Bryan Valenz, magnífico, es estropeado en los dos últimos números por un cambio de colorista, Jessica Kholine, que no sabe recrear la atmósfera del primero. En cuanto al trabajo de Kristantina, la verdad es que es realmente bonito, con una gran recreación del Londres de finales del XIX y unos personajes realmente atractivos (y macabros a partes iguales).
La edición de Planeta Cómic es bonita, pero sin alardes, lo más destacable, quizás, sea el precio tan económico para un TPB de 7 números en un cartoné que atesorar.
En definitiva, con Insexts siguen las buenas sensaciones de Aftershocks, pero la cosa mejora al ver que se han animado a publicar un cómic con una carga feminista tan potente y tanta acción y sexo como para contentar a cualquier tipo de lector.
A ver, yo entiendo que estafa es cuando te quedas tú el dinero, no cuando el dinero es un donativo…