linea_separadora

El #MeToo ha cambiado mucho la forma de ver esta película de los años noventa, una versión oscura y retorcida de las películas para adolescentes que alcanzaron su cúspide con “El club de los cinco” y una adaptación libre de la novela “Las amistades peligrosas” de Choderlos de Laclos.
“Crueles intenciones” comenzó como un proyecto independiente, pero tras ser adquirida por Columbia Pictures, poner a disposición del director Roger Kumble un reparto de nuevas estrellas recién llegadas a Hollywood como Ryan Phillippe, Sarah Michelle Gellar, Reese Witherspoon, Selma Blair, Louise Fletcher, Sean Patrick Thomas, Swoosie Kurtz, Christine Baranski, Tara Reid, Joshua Jackson y Eric Mabius, entre otros, obtuvo un gran éxito de taquilla, una recaudación de muchos millones de dólares en todo el mundo, y se convirtió en un hito y un clásico del prolífico género de películas para y con adolescentes en aquella década.
La película, cargada de ambición, traiciones y erotismo entre jóvenes snobs adinerados, nos contaba como la frívola y seductora Kathryn y su hermanastro Sebastian, estudiantes de un elitista instituto de Nueva York, deciden hacer una maquiavélica apuesta: Sebastian, un consumado Don Juan, se acostará con Annette, una joven que quiere permanecer virgen hasta su matrimonio. Si Sebastian pierde, Kathryn se quedará con su Jaguar, pero si gana… la tendrá a ella, algo que Sebastian ha querido hacer desde que Kathryn se convirtió en su hermanastra.
Una historia traviesa sobre manipulación sexual que hoy en dia costaría mucho de explicar, pero cuyo mayor morbo era ver a Buffy Cazavampiros convertida en una villana seductora.

linea_separadora