Hay películas que, con el paso del tiempo y como sucede con algunos metales, adquieren una pátina que las hace brillar mucho más que el día en ue fueron forjados. “Remando al viento” de Gonzálo Suárez es un ejemplo perfecto de ello. Una historia sobre Mary Shelley y la creación del monstruo de Frankenstein, que tan de moda se ha puesto en los últimos años y que en el año 1987, el director ovetense Gonzálo Suárez abordó sin ningún miedo, con una estética y una atmósfera exquisita (gran fotografía de Carlos Suárez), mostrando una visión muy moderna de la figura de Mary Wollstonecraft Godwin, una de las grandes escritoras del siglo XIX que ha vivido siempre a la sombra de su Frankenstein o el moderno Prometeo, y de su marido Percy Shelley.
En “Remando al viento” nos contaron como Mary Shelley recordaba la Villa Diodati en Suiza, a Lord Byron y su acomplejado secretario John Polidori, quien luego pretendería mantener relaciones con ella y acabó suicidándose, y cómo conoció al joven poeta Percy Shelley, con el que se fugó. Y rememora la creación literaria del mito de Frankenstein, una noche de noviembre de 1816 durante la cual, mientras sus amigos contaban historias de terror, ella daba a luz al legendario monstruo. El guión era de Gonzalo Suárez, aunque la investigación previa fue de su esposa, Hélène, y de Antonio Saura, hijo del cineasta Carlos Saura. Suárez, después de haberse sumergido en la historia real de aquellos personajes, de Lord Byron, de Percy Shelley, de Mary Shelley, de John William Polidori, que en la película fueron interpretados por Lizzy McInnerny (Mary), Valentine Pelka (Percy), Hugh Grant (Byron), José Luis Gómez (Polidori) y una jovencísima y bellísima Elizabeth Hurley como Claire Clairmont, hermanastra menor de Mary.
La película se llevó seis premios Goya en la tercera edición de los galardones del cine español, y el Premio Sant Jordi a la mejor película. Merecidos premios para una película hermosa, hecha con muchísima sensibilidad, que profundiza y elucubra sobre uno de los grandes momentos de la historia de la literatura romántica: ¿qué paso en la Villa Diodati, a orillas del Lago Ginebra, durante una semana de otoño de 1816, llamado el año sin verano?
“Remando al viento” (Gonzálo Suárez, 1987)

A ver, yo entiendo que estafa es cuando te quedas tú el dinero, no cuando el dinero es un donativo…