El año pasado se publicó la, hasta la fecha, última entrega de Enseñanza Mágica Obligatoria: El más allá no, lo siguiente, una alocada y mucho más original versión del colegio de magos creada por Sergio S. Morán y que publica desde su web.
Enseñanza Mágica Obligatoria 6: El más allá no, lo siguiente
Guión: Sergio S. Morán
Dibujo: Sergio S. Morán
A color, rústica
64 páginas
Precio: 7,00 euros
Uno de nuestros alumnos se ha muerto. Pero vamos, nada grave, ¿quién no se ha muerto alguna vez? No suele ser ningún problema cuando bajo el gimnasio de tu colegio hay siete bocas para ir al infierno a buscar el alma del fallecido.
El problema es que tampoco está en el infierno. En ninguno de ellos. Ni en ningún cielo, ni en el limbo, ni… ¿Dónde buscas un alma cuando ha caído más allá del más allá?
¿A dónde van los muertos cuando mueren?
Para aquellos que ya conocéis a Sergio S. Morán hablaros de Enseñanza Mágica Obligatoria será algo redundante, máxime cuando podéis leer todo el material publicado hasta la fecha gratuitamente en su página web, aunque a mi me gusta reservarme para el micromecenazgo que Morán realiza todos los años para entregarnos las nuevas dosis de “su droga” recopilada en un único tomo y que recoge el arco anual publicado en la susodicha web.
En Enseñanza Mágica Obligatoria tenemos a un grupo de alumnos de diversas procedencias y razas fantásticas que han ido estrechando lazos a lo largo de los años de preparación educativa, aunque esto, bueno, más que preparación académica se puede resumir con un sálvese quién pueda ya que en EMO suele morir hasta el apuntador. Y como muestra un botón dado que los chicos y chicas tendrán que viajar al ultramundo para intentar salvar a Valdis, una de ellos que, murió tras los eventos del volumen anterior y que ahora intentará rescatar viajando al cielo, al infierno, al limbo y a donde se les ocurra viajar para encontrarla.
El grupo está compuesto por varios personajes; Genara, Ángela, Buentiempo, Víctor, Valdis, Maram… y varios más que se van metiendo en problemas prácticamente a problema por página, a veces más, y que siempre nos ofrecen un buen giro de guión, o coña, al final de cada página. Aquí se resuelven los pequeños inconvenientes del volumen anterior en las primeras 50 páginas y se añaden 15 páginas extra con el verano de los alumnos en el pueblo, en una historia que eleva el nivel de locura del lector (y especialmente del autor) en Hot Summer in Villahostia de la Patá y nos muestra el típico pueblo español aunque con sorpresa final.
Me divierte muchísimo Enseñanza Mágica Obligatoria, Sergio Morán convierte a los alumnos en auténticas personas, con sentimientos con los que empatizar, con muchísimo sentido del humor y una manera de afrontar el caos y los problemas que sólo puede ser fruto de la juventud… y de la locura (aunque esto les viene por culpa de una transferencia de su creador). Estamos ante unos personajes que se darán de tortas con quien sea convencidos de que pueden con cualquiera, siempre y cuando Genara esté por allí para ayudarles.
Gráficamente Sergio no está al nivel de, por ejemplo, Laurielle (por cierto tenéis que leer El Vosque, que también está disponible online gratuitamente y también cuenta con ediciones anuales de cada arco argumental e incluso una edición integral de Gigamesh del primer arco que es oro y que ya reseñamos en su día puro oro) pero su trabajo resulta perfecto para este tipo de serie, alegre, desinhibida y caótica, con personajes muy expresivos y situaciones hilarantes.
La edición tampoco es que parezca amateur, estamos ante una rustica, con papel de calidad, a color y en la que sólo echo en falta algún resumen de los tomos anteriores. Por cierto, son 64 páginas por 7 euros, algo que me parece un chollo gracias a la autoedición.
En definitiva, cualquier trabajo, repito, CUALQUIER TRABAJO de Sergio Morán merece ser descubierto y disfrutado, y Enseñanza Mágica Obligatoria está en los primeros puestos.
A ver, yo entiendo que estafa es cuando te quedas tú el dinero, no cuando el dinero es un donativo…