Gracias a Planeta Cómic voy a poder hacerme con la serie entera de Capitán Tsubasa, Oliver y Benji para los viejales, la serie de manga que acabó derivando en la seguidísima serie de anime que tan buenos momentos nos trajo.

Capitán TsubasaCapitán Tsubasa 1 (de 21)
Edición original: Kyaputen Tsubasa JAP
Fecha de edición: agosto de 2020
Guión: Yôichi Takahashi
Dibujo: Yôichi Takahashi
Formato: Rústica, 352 páginas. Blanco y negro.
12,95€

Tsubasa Ôzora es un chico de sexto de primaria que se ha criado junto a su gran amigo, el balón de fútbol. Al entrar en su nuevo colegio, el Nankatsu, conoce al increíble portero Genzô Wakabayashi, de la escuela Shûtetsu, y le reta. ¡¡Todo se zanjará en el enfrentamiento general entre los dos colegios!!

De un tiempo a esta parte me ha dado por volver al manga, aunque, como siempre, es complicado saber hacia qué manga decantarse, estoy enganchado a Atelier of Witch Hat y eso me ha llevado de vuelta al mundo del manga, aunque reconozco que la saturación de títulos actual hace que no me sea nada sencillo decantarme por uno u otro, pero entonces llegó Capitán Tsubasa, de la mano de Planeta Cómic, y la añoranza… ah, la maldita añoranza.

La edición de Planeta Cómic es una maravilla de 352 páginas, a tamaño habitual de tomitos manga, perfecto para engancharme desde las primeras páginas hasta el mismísimo final del tomo y dejarme con un ansía enorme por continuar leyendo ¡y aún faltan otros 20 tomos! Y no pienso perderme ninguno.

La historia de Capitán Tsubasa es conocida por todos, a fin de cuentas si el manga se hizo conocido en España fue por el anime Oliver y Benji que tan popular se hiciera en Tele 5 y que nos tenía enganchando mientras veíamos a los personajes correr inmensos campos de fútbol arriba y abajo y realizar jugadas espectaculares, paradas y goles imposibles y, sobre todo, adrenalíticos.

Capitán Tsubasa nos narra la historia de Tsubasa, un chaval (muy joven, se supone que tiene 11 años al inicio del manga) que sueña con llevar a Japón a ganar la Copa del Mundo, pero cuya jornada comenzará llegando a una nueva ciudad y “enemistándose” con el gran portero Genzô Wakabayashi, así su duelo centrará la atención del primer volumen durante las más de 300 páginas de este tomo, casi el doble que los tomos que Glénat editó allá por 2003 (sí, ¡ya han pasado 16 años!), en el que disfrutaremos del doble enfrentamiento entre Tsubasa y Genzo con el mismo entusiasmo que si estuviésemos viendo la serie de anime, y es que la traslación del manga al anime es perfecta.

En cuanto al dibujo de Yôichi Takahashi la verdad es que me recuerda a ratos al maravilloso, y adorado por mi, Mitsuru Adachi, creador de Bateadores e incluso la historia podría tener ciertos paralelismos. Pero es un dibujo amigable que después cambia y utiliza muchísimas líneas cinéticas en las escenas de acción.

En definitiva, dudé un poco a la hora de meterme en el primer número pero estoy más que dispuesto a continuar siguiendo la serie regular de Capitán Tsubasa porque he disfrutado como cuando la vi en la TV por primera vez.