Casi tres años después de su edición en España ,y aprovechando el Marvel Deluxe de Panini Comics de “Planet Hulk“, por fin he encontrado el valor para leer “World War Hulk“… ¡y me ha gustado!
Vayamos por partes. Para empezar, y a pesar de lo que pueda parecer, este cross-over no es tan bestial como Dinastía de M, Civil War, Reinado Oscuro o Asedio, por citar algunos de los cross-over más destacados de la Casa de las Ideas en los últimos, y oscuros, años. World War Hulk está algo mas contenido y, bueno, aquí tenéis un enlace que sirve como demostración. Naturalmente muchos de estos cómics no son necesarios (y, aparte, Hulk hubiese necesitado una secretaria, porque anda que no se “reunió” con héroes durante su World War Hulk…) por lo que, a priori, con leerte World War Hulk y World War Hulk Primera Línea seleccionar sólo los 5 números de Primera Línea) basta y sobra, e incluso Primera Línea… eso sí, leerse la serie regular de Hulk merece la pena, así como echar un vistazo a El día después. Control de Daños (muy divertido, la verdad, me encanta por su humor el trabajo de Salva Espín es sensacional), El día después (por aquello de ver cómo acaba todo) y El día después (Guerreros) (que sólo merece la pena porque Rafa Sandoval se sale), pues tenemos el cross-over salvado. El resto de historias… bueno, algunas son puro relleno y otras son entretenidas, sin más.
El argumento es un tanto risible porque, vale, a Hulk le envían a otro planeta los Illuminati (si es que, estos héroes que gobiernan el mundo en la sombra son un poco chapuzas), allí, después de pasarlas canutas, se liga una churri, le hace un bombo y… ¡explota la nave en la que los Illuminati le enviaron!… ¡venganza! Cojo a mis amigos, regreso a la Tierra y pateo el culo a Rayo Negro, a Iron Man, a los Vengadores, a los 4F a… en fin, a todo el mundo… y además lo hace rapidito, que estos pringaos no le duran ni medio tebeo. El problema está en que todo el mundo le dice que no, que no han sido ellos, algunos héroes incluso apoyan a Hulk para que al final este siga erre que erre, repartiendo mamporros, hablando de matarlos a todos para que al final sí, está cabreado “de la ostia”, pero les da una lección a todos y… ¿muere salvando al mundo?
Vale que no hay demasiada introspección (aunque Peter David demostró que sí, que con Hulk se podían hacer cosas buenas) pero la historia avanza rápida y ágilmente, apenas hay respiros y es un puro derroche de tortas, un Hulk contra todos que divierte porque permite desconectar la neurona, relajarse y disfrutar… porque si nos ponemos a pensar… ¿World? War Hulk… ¡pero si no salen de Manhantan! Eso ya es algo más que ombliguismo, ¿no? Y qué cabezón está Hulk/Bruce con lo de culpar de todo, todito, a los Illuminati y… pero, coñe, funciona, te diviertes, pasas el rato rápidamente y te encuentras con sorpresas como el regreso de Control de Daños (geniales) o el excelente trabajo de gente como Salva Espín o Rafa Sandoval…
Es un cross-over y ya sabemos que no se les puede pedir mucho (especialmente que no nos saquen demasiado los cuartos) así que tengo que decir que sí, World War Hulk me ha resultado muy entretenido… ahora vamos a por Planet Hulk.
Curioso porque justo ahora ando enganchado a la trilogía de los Arquitectos... y en cuanto acabe con ella iré a…