Cuando uno puede presumir de haber sido el responsable de la ceremonia de inauguración de unos Juegos Olímpicos (los de Londres, en el año 2012), haber dirigido una película considerada una referencia del cine más independiente y transgresor (“Trainspotting“), un biopic complejo (“Steve Jobs“), una película de ciencia-ficción (“Sunshine“), una propuesta distinta a lo habitual sobre un apocalipsis zombie (“28 días después“) y, además, lucir un Óscar como mejor director en la repisa de la chimenea de casa (“Slumdog Millionaire”), ¿qué más le queda por hacer? La filmografía del director británico Danny Boyle, uno de los más inclasificables y eclécticos de la actualidad, está trufada de películas de lo más variopinto en temática y argumento, y parece que aún tiene mucho que contar.
Para “Sunshine“, su primera película de ciencia-ficción, y la única hasta ahora, Danny Boyle explicó que se documentó en las tres películas del género que más le habían marcado (“2001. Una odisea en el espacio“, de Stanley Kubrick; “Solaris“, de Andrei Tarkovsky; y la “Alien“, de Ridley Scott), y es cierto que hay algo de todas ellas en el guión de Alex Garland. Es, por lo tanto, una película de ‘hard science-fiction‘, que es aquella donde se tiene un especial cuidado en el rigor científico, poniendo el ‘science‘ por encima del ‘fiction‘. Eso la hace de digestión difícil para algunos espectadores, que prefieren vivir emociones en un universo de ciencia-ficción que no cumpla con las leyes de la física o que, directamente, las ignore. “Star Wars” formaría parte de este segundo grupo, mientras que “El Marciano” formaría parte del primero.
Protagonizada por Rose Byrne, Cliff Curtis, Chris Evans, Troy Garity, Cillian Murphy, Hiroyuki Sanada, Mark Strong y Michelle Yeoh, entre otros, en “Sunshine” estamos a mediados del siglo XXI. El Sol se está apagando, y la Tierra vive un invierno glacial que va a acabar con la vida en el planeta. Un equipo de astronautas y científicos, seis hombres y dos mujeres, (el físico Capa. el ingeniero Mace. la bióloga Corazón. la piloto Cassie. el oficial de comunicaciones Harvey, el capitán Kaneda y el médico Pinbacker), parte a bordo del Ícaro II hacia el Sol, con una misión indispensable para salvar así a la humanidad de su extinción: lanzar una gigantesca bomba al núcleo de la estrella para reactivarla y salvar a la Humanidad. Pero los tripulantes pierden contacto con la Tierra, y además reciben una llamada de socorro de una nave que llevaba siete años desaparecida. El hallazgo del Icaro I, que ya había llevado a cabo la misma misión siete años antes y había fracasado, y el intento por encontrar con vida a su tripulación pondrá en peligro la misión.
El único defecto que se puede achacar a “Sunshine” es haberse alejado de las tres referencias de Danny Boyle antes mencionadas y haberse acercado demasiado a películas como “Esfera” o “Horizonte Final“, con personajes que pierden la cordura y dejan la misión científica en segundo término, con los protagonistas más preocupados en salvar el pellejo que en salvar la humanidad. El resultado final es el de dos películas diferentes: una primera mitad de ciencia-ficción ‘hard‘ excelente y una segunda parte de terror totalmente prescindible.
Pues yo recuerdo está película con mucho cariño. Quizás no llegue al nivel de Toy Story o Gremlins pero... ¿qué…