Nos acercamos al final de la etapa de Grant Morrison en New X-Men y tenemos el gran golpe de efecto sorpresa que ha estado fraguándose durante toda la etapa, un enemigo sorprendente regresa para cobrarse su venganza.

New X-MenNew X-Men 6 Planeta-X
Edición original: New X-Men 146-150 USA
Fecha de edición: septiembre de 2020
Guión: Grant Morrison
Dibujo: Phil Jimenez
Tinta:  Andy Lanning, Simon Coleby
Color: Chris Chuckry
Formato: Cartoné, 136 páginas. Color.
15€

Todo lo que ha ocurrido desde el genocidio de Genosha a manos de Cassandra Nova conduce a Planeta-X . Magneto, el peor enemigo de La Patrulla-X, sigue vivo. No sólo eso: Ha estado ocultándose en el Instituto Xavier, esperando el momento preciso para lanzar su más terrible movimiento contra el grupo de mutantes que ha desbaratado sus planes una y otra vez. Y también contra todos los humanos sobre la faz de la Tierra.

¡Y llegó la gran sorpresa de Morrison en los New X-Men! La mente que ha estado detrás de las conspiraciones que han asolado al grupo de mutantes, y que ha causado incluso deserciones entre sus miembros, por fin se desvela y el culpable de todo era… Xorn… que en realidad era Magneto. Y aquí llegó la primera gran decepción con los guiones de Morrison y es que a los fans no les acabó de gustar NADA la interpretación que el británico hizo del carácter de Magneto, y es que se basó en la personalidad primigenia de Magneto y, bueno, se saltó TODO el desarrollo que Erik había tenido a lo largo de las décadas, por no hablar ya de su lucha por la redención que tan magistralmente llevó Claremont, todo ello desaparece y se convierte en… lo peor.

Pero hablemos de la historia, todo salta por los aires cuando Xorn/Magneto se quita la careta, derrota, por los pelos, a Xavier y se marcha con el grupo de alumnos de su clase especial a hacer el NAZI a New York. Y no es sólo que Magneto se haya convertido en adicto a la droga que le aumenta sus poderes, no, ni tampoco que parezca un mamarracho la mayor parte del tiempo, no, es cómo se comporta como un auténtico nazi y pretende GASEAR a los humanos. Es IMPOSIBLE que el Magneto que conocemos y amam-odiamos tomase las decisiones que se le ven tomar aquí.

Mientras tanto también comienza el relato de la despedida de Jean de los New X-Men y lo cierto es que, para mi, es otra decepción a sumar para Morrison (aunque creo que lo enmendará en el siguiente volumen, pero, aún con todo, es un quitársela de en medio sin gracia ni sustancia, por mucho paseíto espacial hasta el sol que se de con Lobezno, todo parece una excusa para juntar a Scott y Emma.

Total que la etapa de Morrison se acerca a su final y para celebrarlo Marvel le puso como dibujante a Phil Jimenez, al que ya vimos en el volumen anterior, y ¡madre mía! Menuda mejoría para la lectura el poder contar con el mismo dibujante en todo un volumen y, encima, con una historia de Magneto desatado (aunque sigo pensando, como más adelante decidirían en Marvel, que ese no era Magneto) en Nueva York.

La edición de Panini sigue siendo deliciosa, esos textos de prólogo y epílogo son unas pequeñas maravillas que demuestran lo que ECC Cómics parece no haber entendido aún: un cómic, en el que se introduce al lector con un prólogo y se le despide con un epílogo que le deja con ganas de más y que hace referencias a todo lo leído en ese volumen que acabas de terminar… Eso son guiños de complicidad con el lector, que éste agradece y que, además, te deja con ganas de más.

En definitiva, hasta aquí llegaba mi disfrute sin pegas de la etapa de Grant Morrison en los New X-Men, sigue teniendo varias cosas positivas pero es imperdonable lo que le hace a Magneto y a Jean Grey, al primero lo destruye y a la segunda se la quita de encima.