¿Cómo se gestiona a nivel personal la vergüenza por el Holocausto en Alemania? Esta y otra infinita cantidad de preguntas llevaron a Nora Krug a (tras un trabajo de 6 años) Heimat, lejos de mi hogar (Salamandra Graphic, 2020). Un excelente trabajo de reflexión e investigación familiar alrededor del tema alemán por excelencia de la segunda mitad del s. XX.
- Título: Heimat. Lejos de mi hogar
- Autora: Nora Krug
- Editorial: Salamandra Graphic
- Páginas: 288
- Idioma: Español
- ISBN: 8416131546
«¿Cómo vas a saber quién eres, si no entiendes de dónde vienes?»
¿Cómo se gestiona a nivel personal la vergüenza por el Holocausto en Alemania? Específicamente a nivel personal. ¿Es posible asumir que tu abuelo combatió con la Wehrmacht? ¿Se afilió al NSPD? ¿Cómo se comportó con sus vecinos judíos después de 1933? ¿Cómo sobrellevó tu abuela perder a un hijo en el frente?
Esta y otra infinita cantidad de preguntas llevaron a Nora Krug a (tras un trabajo de 6 años) Heimat, lejos de mi hogar (Salamandra Graphic, 2020). Un excelente trabajo de reflexión e investigación familiar alrededor del tema alemán por excelencia de la segunda mitad del s.XX.
Un increíblemente elaborado collage (6 años de investigación y recuperación de materiales de la época), precioso y maravillosamente ilustrado por Nora Krug. Ilustradora, autora y profesora alemana residente en Estados Unidos; este, si no me equivoco, es su primer tebeo publicado en España.
Vivir fuera de su país llevo a Krug a darse cuenta de dos aspectos de Alemania sobre los que no había sido consciente: los tópicos que sobre los alemanes hemos desarrollado (el nazismo tiene un eje fundamental en la forma en que vemos a la sociedad alemana) pero también como la cultura alemana estaba (está) imbuida en ella. De qué manera la vergüenza por el holocausto había modelado a Nora Krug, en cuanto alemana, cómo la guerra definió el desarrollo de sus relaciones familiares.
Tal y como cuenta en esta entrevista para la web Public Seminar: (la traducción es mía)
“Nunca habría escrito este libro si no hubiera marchado de Alemania. Durante los 17 años que he vivido en el extranjero me he sentido más alemana que nunca antes. Como alemana viviendo entre no-alemanes, me di cuenta de que siempre sería un individuo y también una representante de mi país y, por tanto, de la historia de mi país. A menudo me encontré con estereotipos negativos hacia la identidad cultural alemana, pero también me hicieron preguntas sinceras sobre el pasado de mi familia que no supe cómo responder.
En el diario La Tercera Krug añade:
“Cuando vives en tu país, no estás realmente consciente de que tu punto de vista es muy específico a tu cultura. Cuando dejas tu marco cultural, de pronto te ves a ti misma y tu herencia desde afuera, y ves cuánto de lo tuyo está profundamente incrustado en la cultura de la que vienes”.
Situación paradójica, por un lado el estado alemán lo ha gestionado de manera modélica y en la actitud de Alemania (como estado) respecto a la memoria del Holocausto no puede encontrarse ninguna queja; por otro lado, a nivel social y familiar la vuelta de la ultraderecha al parlamento (que se produjo mientras la autora terminaba el trabajo), el silencio como tónica general en una sociedad de posguerra que gestionó su desnazificación y vuelta a la paz de maneras diametralmente opuestas según el reparto llevado a cabo con la URRS, dejan entrever la complejidad y dificultad de asumir un pasado reciente tan horrible como el de Alemania.
Krug no trata de explicar el sentido nacional de la vergüenza alemana por el Holocausto, o al menos no directamente, elige centrarse en su familia (acertadamente) sin la intención de analizar la conciencia colectiva de Alemania. Y aquí, creo que radica lo tremendamente interesante de Heimat, la gestión de la vergüenza familiar cuando tu abuelo ha sido un mitläufer, un seguidor, uno más del rebaño que impulsó una de las mayores atrocidades de la historia.
Es una obra honesta, enormemente sincera y triste, como no puede ser de otra manera cuando las raíces de tu historia familiar son el silencio y la vergüenza.
Heimat. Lejos de mi hogar es uno de los imprescindibles del año.
Mención aparte merece el maravilloso e impresionante trabajo de Sergi Puyol en la maquetación y rotulación de Heimat. Lejos de mi hogar. De otro mundo. Trasladar el collage de Krug para su edición en español de la manera en que lo hecho… de verdad sin palabras.
A ver, yo entiendo que estafa es cuando te quedas tú el dinero, no cuando el dinero es un donativo…