Durante los pasados meses de confinamiento una serie de autores se empeñó en compartir con nosotros sus trabajos a través de las redes sociales, una de las que más ilusión me hacía leer a diario eran las de Laurielle que, en base a una ración de 2 viñetas diarias, nos iba narrado su confinamiento. Posteriormente los recopiló en un único tomo: Diario de estar por casa. Cómics del confinamiento por Laurielle por un precio de 10 euros.

Diario de estar por casaPara quién no conozca a Laurielle os diré que es la grandísima dibujante de El Vosque una maravilla en la que participa junto a Sergio Morán y que ha llevado a que la siga en otros proyectos como Nada del otro mundo en Fanternet (estoy deseando que salga el primer volumen), aunque si os soy sincero a mi me atrapó con El Vosque, pero me enamoré de su trabajo cuando narró una aventura rolera a través de una serie de Tweets que siempre remataba con una encuesta y que dio pie a esta maravilla que tengo colgada justo frente a mis ojos mientras escribo esta reseña.

Pero volvamos al Diario de estar por casa, durante 90 días Laurielle compartía dos viñetas, no relacionadas entre sí normalmente, en las que nos iba resumiendo sus experiencias confinada (venía bien comprobar que había más gente afectada psicologicamente, jejeje). Las viñetas, como el trabajo de Laurielle, son realmente especiales y recuerdo que procuraba no perderme ninguna mientras esperaba el momento en el que que nos dejasen salir de casa, y aun cuando nos dejaron salir continué leyendo sus viñetas porque quería una buena dosis de humor, y Laurielle supo darmela.

Laurielle optó, como Álvaro Ortiz y su El Murciélago sale a por birras, por publicar su trabajo durante el confinamiento en Diario de estar por casa, una grapa sencilla, con papel de calidad y en blanco y negro y 52 páginas por 10 euros, con el añadido de que por cada venta 2 euros irían a Médicos Sin Fronteras y otros 2 euros a FESBAL. En total Laurielle vendió más de 560 ejemplares y, en primer lugar, realizó las donaciones (1150 euros a cada organización). Da un gustito muy rico el participar en este tipo de proyectos, la verdad.

Como una imagen vale más que mil palabras os pongo algunas de las viñetas, la mayorías las podéis encontrar gratuitamente en el Twitter de Laurielle, excepto por unas cuantas de material extra realizadas para esta ocasión, pero tenerlas recopiladas en un volumen tan especial y haber colaborado con dos buenas causas… Además, si no te hace sonreir de principio a fin es que estás roto por dentro.

No hay mucho más que decir de Diario de estar por casa, Laurielle tiene una magia a la hora de dibujar y dialogar personajes que consigue que te enamores de su trabajo y a mi me tienen rendido, tanto ella como Morán, desde El Vosque, ¿y a vosotros? Si no lo hacíais antes, ¡aún estáis a tiempo!