“Capitán América: Civil War” (Anthony y Joe Russo, 2016)

Esto no es una reseña de Capitán América: Civil War al uso, es más bien un resumen de la película en el que dejo caer alguna que otra pulla, pero también os lo digo desde ya: ¡no os podéis perder Capitán América: Civil War!

Capitán América: Civil War
Título original: Captain America: Civil War aka
Director: Anthony Russo, Joe Russo
Guión: Christopher Markus, Stephen McFeely (Cómic: Mark Millar) (Personajes: Joe Simon, Jack Kirby)
Música: Henry Jackman
Fotografía: Trent Opaloch
Reparto: Chris Evans, Robert Downey Jr., Scarlett Johansson, Sebastian Stan, Anthony Mackie, Don Cheadle, Jeremy Renner, Chadwick Boseman, Paul Bettany, Elizabeth Olsen, Paul Rudd, Emily VanCamp, Tom Holland, Daniel Brühl, Frank Grillo, William Hurt, Martin Freeman, Marisa Tomei, John Kani, John Slattery, Alfre Woodard, Stan Lee, Heidi Moneymaker, Gene Farber, Florence Kasumba
Productora: Marvel Studios / Marvel Entertainment / Sony Pictures Imageworks (SPI)
Duración: 147 min.
Web oficial

Después de que otro incidente internacional involucre a Los Vengadores, causando varios daños colaterales, aumentan las presiones políticas para instaurar un sistema que exija más responsabilidades y que determine cuándo deben contratar los servicios del grupo de superhéroes. Esta nueva situación dividirá a Los Vengadores, mientras intentan proteger al mundo de un nuevo y terrible villano. Tercera entrega de la saga Capitán América.

Voy a dar por supuesto que todos habéis leído Civil War, el evento de Marvel en el que, tontamente, Iron Man y el Capitán América (y los amigos de éstos) se daban de tortas mientras uno ponía el culo para contentar al primero y el otro se le resistía lo indecible hasta rebelarse. La saga acabó con dos equipos de Vengadores y con el Capi muerto de un balazo (o varios) en el pecho. La película de Capitán América: Civil War se basa “ligeramente” en este evento y nos presenta un evento en el que un terrorista kamikaze, Calavera, se autoinmola en su intento de asesinar al Capitán América, Wanda, la Bruja Escarlata, intenta evitar que mate al Capi y al alejar a Calavera y su arnés explosivo (que, sorprendentemente aguanta un montón de golpes, eso es una bomba segura) la onda expansiva acaba matando a once inocentes wakandanos… nadie se pregunta cuántos hubieran muerto de haber explotado la bomba a ras de suelo.

Mientras tanto Tony Stark está regalando las becas como si fuera caramelos en el MIT, se siente culpable por lo que pasó con Ultrón en Vengadores: La era de Ultrón, así que cuando los típicos alarmistas dicen que los Vengadores deben actuar de acuerdo a lo que dicte la ONU… se le hace el trasero hidromiel y corre a firmar, no sin antes presionar a todos los demás para que firmen. El Capitán América no está de acuerdo, y más tras comprobar que culpan de todo al Soldado de Invierno, Bucky Barnes, y que no sólo quieren capturarlo, es que lo de “tirar a matar” parece ser algo más que una sugerencia… que a Tony le parece bien. Sólo hay una foto como prueba de que estaba por donde explotará la bomba que mata al rey de Wakanda y que pone a huevo la presentación de Pantera Negra (quien, por cierto, busca venganza contra el Soldado de Invierno), pero parece que a todos les va bien así, matando sin juicio ni nada por el estilo, tampoco es que el Soldado de Invierno fuese muy inocente o que hable por él alguien a quien respetemos… ¿no?

Total que se forman dos bandos, hay un par de rifirrafes entre el Capitán América y las fuerzas de la Ley y tanto Iron Man como el Capi comienzan a reclutar aliados mientras el pesado de Pantera Negra sigue fijo en su objetivo de matar al Soldado de Invierno y un pringaillo, el que ha orquestado todo, se sale con la suya con relativa facilidad. Para que luego hablen de los servicios de inteligencia…

El caso es que aparece Spider-Man, Tom Holland, y mola, aunque me recuerde a un joven Martin Freeman, pero eso de ver que la tía May es Marisa Tomei…. 51 años, un pibonazo aún… no me cuadra mucho con los problemas del corazón del peñazo de la tía May… pero me vale, porque parece que es una versión Ultimate, ok. Spider-Man mola, mucho, sí, nos saltamos el origen (todos lo conocemos ya y sino, para eso ya tendrá la película) verlo en acción es una pasada… excepto que tiene 16 años, que Tony Stark lo recluta porque conoce su identidad secreta tras ver un vídeo en Youtube y porque lo enfrenta a algunos de los seres más poderosos del universo cinematográfico Marvel. Tony, algún día serás un gran padre, o no…

Bueno, total, que los dos grupos de Vengadores se pegan de tortas en el aeropuerto, mola muchísimo y todos tienen su momento de gloria, aunque a mi me gusta especialmente Paul Rudd con su Ant Man (y algo más). Máquina de Guerra demuestra que necesita una nueva actitud y Iron Man que es muy muy muy naz… suyo.

Llegamos a Siberia, el Capitán América y el Soldado de Invierno se enfrentan al malo final… sólo que no lo es, acaban por enfrentarse al propio Iron Man, a muerte, y todo porque un mindundi (el malo) le muestra a Tony un vídeo de cómo el Soldado de Invierno asesinó a sus padres hace 30 años… Que sí, que lo entiendo, es un trauma inconcebible (como es también preocupante que a Tony sólo le moleste que maten a su madre “¿has matado a mi padre? ¿pero mi madre está bien? ¿sí? ¡entonces seguimos siendo colegas!”) pero a poquito que Iron Man se haya informado un poquito sobre quién es el Soldado de Invierno sabrá lo que le hicieron los rusos e Hydra, ¿no? Es igual, Tony se vuelve crazy e intenta matar al Soldado de Invierno, el Capi se pone duro y después de ver cómo Iron Man le revienta el brazo biónico a Bucky Barnes le da una señora paliza al vengador dorado, deja el escudo (“¡ese escudo lo hizo mi papá, no es tuyo!”… sí, ese padre al que tampoco parece que quisiera… nada, salvo por la empresa que le legó, el escudo del Capitán América, etc, pero ¿amor? Cero) y se pira.

Como colofón tenemos una carta del Capi a Tony en la que le dice que, bueno, oye, que seguimos siendo colegas, toma un móvil, si me necesitas llama y acudiremos (es de suponer que habla de él y de sus Vengadores Secretos) explicaciones sobre lo ocurrido en Siberia, pocas, muy pocas, por menos conflicto que este se han creado enemigos de por vida y enemistades dignas de grandes sagas. Bucky Barnes decide que lo congelen en Wakanda (y así recordamos que pronto habrá película de Pantera Negra) hasta que alguien sepa limpiarle el cerebro de lo que le hizo Hydra y luego hay un par de escenas post-créditos, así que no abandonéis demasiado deprisa Capitán América: Civil War.

Vale, sí, le puedo sacar pegas a la película y al guión, al igual que se las puedo sacar al tebeo de Mark Millar (bueno, a ese tebeo le puedo sacar muuuuchas más), pero Capitán América: Civil War es una pasada de película, de lo mejor que ha dado el género de superhéroes y un preámbulo perfecto ante la tercera etapa del universo cinematográfico de Marvel. Le dan sopas con ondas a DC en el cine (por cierto, visto el tráiler de Escuadrón Suicida a pantalla gigante y me reafirmo: es una mierda de tráiler con una canción que hace cojonuda cualquier imagen que le pongas de fondo) y están sabiendo trasladar la “experiencia Marvel” al cine con maestría.

No quiero acabar sin reclamar, de una santa vez, que Disney/Marvel deje de ser tan machista y le den una más que merecida película en solitario a la Viuda Negra. ¡Es de justicia! Y más tras ver el pedazo de papel que Scarlett Johansson ha realizado en Capitán América: Civil War, como ya hiciera en Capitán América: Soldado de Invierno.