Reconozco que ando algo cansado de ver cómo ha ido la deriva de los héroes en el Universo Marvel, estaba deseando encontrarme con una serie que me alegrase el día al leerla y que me hiciese sentir que hay un guionista que escribe lo que yo quiero leer. Esa serie ha llegado y “Campeones” me tiene completamente enamorado gracias al trabajo de Mark Waid y Humberto Ramos.
Campeones 1
Edición original: Champions 1 USA
Guión: Mark Waid
Dibujo: Humberto Ramos
Color: A color
Formato: Comic-book, 40 págs. a color.
2,95 €
Tras los acontecimientos de Civil War II , Ms. Marvel, Nova y Spider-Man han decidido dejar Los Vengadores y unirse a Cíclope, Viv Vision y el Alucinante Hulk: Seis jóvenes decididos a cambiar el mundo! Y ellos son sólo el comienzo.
Ha pasado ya un tiempo desde que Los Vengadores se reconozcan como unos héroes, la impronta que dejó en el grupo el relanzamiento de Brian Michael Bendis años atrás ha hecho que los ¿tres? ¿cuatro? grupos de Vengadores que existen en la actualidad estén más preocupados por las misiones encubiertas propias del mundo del espionaje o por los grandes enfrentamientos que por el día a día de los héroes que los componen. Si a esto le añadimos que Marvel ha apostado con mucha más fuerza aún por los grandes eventos y que en pocos años hemos vivido dos Civil War, no resulta extraño que haya toda una legión de lectores que ni reconozcan a la franquicia actual ni se identifiquen con estos héroes. Seré sincero, las dos Civil War me parecieron ridículas en su planteamiento inicial: ¿héroes peleando contra héroes? ¿por no ser capaz de dialogar y ponerse de acuerdo? Para eso ya está la política.
El caso es que parece que alguien en Marvel se ha dado cuenta de que la deriva en la franquicia de los Vengadores había ido demasiado lejos, que estos no son unos héroes que resulten realmente inspiradores y son más unos matones, con buenas intenciones, que acaban causando tantos daños y disturbios como los propios villanos a los que combaten, y eso cuando no lo hacen peleando entre sí… o matándose entre sí.
Pero Marvel lleva unos años preparando una nueva generación de héroes que conecte con los más jóvenes y, tras Civil War II, estos héroes se han decidido a dar un paso al frente. No tendrán una gran cantidad de bases secretas/públicas, un hangar repleto de aviones y armas megapoderosas, pero sí tienen la actitud de hacer las cosas como las hacen los héroes y un nuevo nombre que no es deudor de un grupo que, francamente, ya no se reconoce ni a sí mismo. Son los Campeones: Hulk, el nuevo, Spider-man, el Ultimate, Miss Marvel, la nueva, Nova, el nuevo… ¿veis una pauta? Pues sí, la hay, son nuevos héroes que quieren hacer las cosas como las hacían los héroes. Que no contemplan el ser juez, jurado y verdugo y que no se irán alegremente después de zurrar al malo, se quedarán a limpiar el desastre.
Con todo lo que os he dicho sobre los Campeones creo que queda claro que comulgo a la perfección con las ideas con las que Mark Waid ha impregnado, en un solo número, al grupo. Me parece brillante que, ¡por fin!, veamos un grupo de héroes, me da igual su edad, que tan sólo quieren hacer el bien y no quieren discutir o pelearse entre ellos, posar molonamente o implicarse en complejas tramas propias de James Bond. ¡Ya era hora!
Eso sí, no acabo de ver a Humberto Ramos como el dibujante ideal de los Campeones, me parece que suele forzar los escorzos en sus dibujos, que sus expresiones son casi siempre airadas y boquiabiertas y que no acaba de saber dibujar bien, en esta última evolución de su estilo, a adolescentes. Aún así el primer número de los Campeones luce espectacular, llama muchísimo la atención y, seguramente, os enamorará como a mi.
La edición de Panini es una grapa de 40 páginas en las que, además, se incluye un artículo de presentación, las portadas alternativas y el siempre imprescindible Spot On con el que Julián Clemente nos invita a sumarnos al juego de disfrutar, de nuevo, de la emoción de los cómics.
En definitiva, si quieres una serie de héroes reconocibles como tales, que esté protagonizada por algunos de los nuevos héroes más interesantes de la nueva Marvel, no busques más, Campeones es tu serie.
Campeones 2
Edición original: Champions 2 USA
Guión: Mark Waid
Dibujo: Humberto Ramos
Color: A color
Formato: Comic-book, 32 págs. a color.
2,5€
¡Bienvenido a Los Campeones, Cíclope! Como dicen en un lugar que conoces muy bien… ¡esperamos que sobrevivas a la experiencia! Por desgracia, no todos tus compañeros están encantados con que milites en este equipo.
Mark Waid es un guionista que sabe ofrecer series interesantes, sorprendentes y emocionantes para los lectores. En Campeones, en tan solo dos números, nos está ofreciendo una serie que destaca incluso sobre su propio trabajo en Los Vengadores, serie de la que me apeé en su día, algo que no contemplo hacer en Campeones. En este segundo número Waid nos demuestra que estamos ante un título diferente y es que en vez de sacar al héroe de turno en el número 2, Spiderman normalmente, lo que hace es llevarse al grupo de acampada y, bajo la supervisión de Kamala, hacer una dinámica de grupo destinada a estrechar lazos entre los héroes. Así es, ni peleas, ni villanos, ni héroes que den la bienvenida al grupo, una simple interacción entre jóvenes héroes y un nuevo héroe que se suma a la llamada de los Campeones, Cíclope, mi héroe favorito, aunque en su versión adulta.
Estoy realmente encantado con el trabajo de Mark Waid, da gusto leer una serie que se escribe para el disfrute del guionista y de los lectores y en la que se saltan las reglas, se huye de problemas tontos y guerras civiles y, sencillamente, se disfruta.
Incluso empieza a dejar de molestarme el dibujo de Humberto Ramos, curtido algunas de las portadas alternativas me queda incluso la duda de qué dibujante de Marvel sabría dibujar a jóvenes, así que he decidido tolerar el estilo hiperdeformizado de Ramos.
La edición de Panini sigue siendo impecable, sólo le pondría el “pero” de que no me interesan las portadas alternativas si eso eleva el precio de portada. Pero, claro, eso es cuestión de completismo, yo prefiero comic antes que portadas.
En definitiva, Campeones mola y voy a seguir disfrutando con este título mientras siga así.
Campeones 3
Edición original: Champions 3 USA
Guión: Mark Waid
Dibujo: Humberto Ramos
Color: A color
Formato: Comic-book, 32 págs. a color.
2,5€
Lo que empezó como una idea y como un ideal se ha convertido ahora en un movimiento. Pero el problema con los movimientos es que ni siquiera Hulk puede controlarlos. No te pierdas el siguiente episodio de la nueva colección Marvel de bandera.
Aparte de concluir la escena con la que se cerraba el anterior número, PISTA: beeeeesooooo, los Campeones viajan a uno de esos países que los guionistas de Marvel se sacan de la manga cuando quieren intervenir en los “problemas del mundo”, pero no quieren ofender a nadie. Así que vamos a Sharzad, concretamente a Lasibad, donde los Campeones incitan a la rebelión a unas mujeres frente a los matones (ejem, musulmanes, ¿por qué no decir que era, por ejemplo, Arabia Saudí?) que las estaban oprimiendo, y se van después de haber “recogido” un poco. Vamos, que no sé cómo acabarán en el futuro las cosas para estas mujeres, pero normalmente suelen reaparecer cuando consideran que los héroes las han traicionado, y lo hacen a través de un plan de venganza orquestado para… pero, bueno, seguro que Waid no permitirá que eso suceda en los Campeones. Después, casi al final, tenemos una discusión sobre quién debería ser el líder y por fin se oye una voz razonable e inteligente, Viv Visión, que sugiere que debería ser Cíclope… lo malo es que segundos después una nave impacta contra la nave de los Campeones.
Me hace gracia cómo maneja la serie Mark Waid, poco a poco va adentrando al equipo en nuevos y maravillosos problemas sin dejar que la dinámica entre ellos se enfríe. Además, eso de verlos discutir por quién debería ser el líder me recuerda muchísimo al Supergrupo…. ¡y me encanta!.
Con el que no trago es con Humberto Ramos, y lo siento muchísimo, pero es que no lo veo, sí lo veo para dibujar a tios hiperdeformados con los dientes al viento y con cara de mala leche, pero poco más, desde luego no lo veo como el dibujante de Campeones, una serie de ¿adolescentes? ¿jóvenes? Es imposible de dilucidar con su estilo de dibujo… lo que cabrea es ver que luego se lo curra muuuucho más en la portada que en el cómic en sí.
Por cierto, pedazo de galería de portadas que nos incluye Panini en este número, se nota que en Marvel han apostado con fuerza por el juego de las portadas alternativas.
Campeones 4
Edición original: Champions 4 USA
Guión: Mark Waid
Dibujo: Humberto Ramos
Color: A color
Formato: Comic-book, 24 págs. a color.
1,95€
Nuestros héroes están deseando demostrar su valía ante el mundo, pero ahora se enfrentan a un escenario en el que no pueden ganar, hagan lo que hagan. Lo que ocurra, desvelará el verdadero rostro de algunos de los nuevos miembros.
Ahora toca saber quién disparó contra la nave de los Campeones, aunque en realidad es lo de menos, y continuar con la discusión de quién debería ser el líder… y de paso el piloto del equipo. Dejando aparte la identidad de los atacantes lo interesante en este número es que Cíclope y Ms. Marvel resuelven el particular problema de ambos, la guerra de La Patrulla-X contra los Inhumanos, con relajación, conversación y sencillez… Un golpe de efecto impresionante que viene a tirar un tanto por tierra tanto rollo bélico. Ah, por cierto, el casco de Nova… no está bien y, para colmo, el mes que viene toca ver a Masacre-Gwen… uno de esos personajes que en absoluto me llaman la atención.
Nuevamente alucino con Mark Waid y cómo pasa de la acción para desarrollar a los personajes y a sus relaciones. No les da un simple respiro y consigue que el lector disfrute una barbaridad.
Como el mes anterior, no, lo siento, Humberto Ramos no me pega en los Campeones, no consigo saber si Cíclope tiene 12 años, 19 o si es hijo de Míster Fantástico. Con lo que tú has sido…
Nuevamente tenemos unas cuantas portadas alternativas, dos por página, lo que nos ahorra que aumente de precio esta grapa. Y el imprescindible Spot-On de todos los meses. Una gozada.
Pues yo recuerdo está película con mucho cariño. Quizás no llegue al nivel de Toy Story o Gremlins pero... ¿qué…