Ya llevamos unos días con las aventuras de Tintín en la cartelera, así que muchos ya la habréis visto y tendréis vuestra opinión. A mí me ha gustado bastante aunque puesto a “sacar punta” a todo no me resisto a encontrarle alguna pega. En cualquier caso Steven Spielberg, Peter Jackson, animación y aventuras a la vieja usanza, ¿qué más se puede pedir?

 

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Título original: The adventures of Tintin: The secret of the Unicorn.
País: EEUU.
Duración: 109 min.
Género: Animación, aventuras, acción.
Interpretación: Jamie Bell (Tintín), Andy Serkis (capitán Haddock), Daniel Craig (Sakharine), Simon Pegg (Hernández), Nick Frost (Fernández), Toby Jones (Silk), Mackenzie Crook (Tom), Daniel Mays (Allan), Gad Elmaleh (Ben Salaad), Joe Starr (Barnaby).
Guión: Steven Moffat, Edgar Wright y Joe Cornish; basado en los cómics de Hergé. Producción: Peter Jackson, Kathleen Kennedy y Steven Spielberg.
Música: John Williams. Montaje: Michael Kahn.
Dirección artística: Andrew Jones y Jeff Wisniewski.
Distribuidora: Sony Pictures Releasing de España.
Estreno en USA: 21 Diciembre 2011.
Estreno en España: 28 Octubre 2011.

Desde el mismo instante en que Steven Spielberg decidió adaptar Tintín a la gran pantalla estaba claro que iba a ser una película de éxito y es que era casi imposible que esa asociación saliera mal. En cualquier caso no ha sido un proyecto fácil de llevar a cabo ya que lo llevaba mascando desde que hiciera “En busca del arca perdida” allá por 1982, momento en que varias críticas francesas asociaron a Tintín con Indiana Jones y eso le descubrió el cómic. La idea de la adaptación avanzó entonces hasta tal punto que Spielberg llegó a concertar una cita con Hergé que finalmente no se produjo porque el dibujante francés murió. Aquello fue la génesis de la película que podemos ver ahora y de muchos quebraderos de cabeza sobre cómo se iba a hacer. Durante parte de ese tiempo los derechos de adaptación los adquirió Steven Spielberg pero no le pertenecieron siempre. Durante este intervalo la serie de “Las aventuras de Tintín” de Stéphane Bernasconi, producida en 1991 puso las cosas difíciles porque se trata seguramente de la mejor traslación a una pantalla de las aventuras del periodista francés.

No hay que ver sólo este proyecto de Tintín como un mero proyecto de evasión y entretenimiento. A Spielberg no le ha interesado sólo por sus posibilidades argumentales (que las tiene y muchas, evidentemente), sino también por la oportunidad de desarrollar algunos aspectos técnicos que se encuentran actualmente en plena evolución: la animación basada en la captura en movimiento y el 3D. Ahí es donde entra en el proyecto Peter Jackson (vaya colaboración, los dos grandes del cine de entretenimiento juntos) porque bajo sus auspicios ha crecido la que actualmente es la mejor empresa de motion-capture, la WETA, que ha venido desarrollando esta tecnología desde “El señor de los anillos” ya que la precisaba para Gollum, casi siempre con Andy Serkis como particular conejillo de indias (de nuevo repite en esta película dando vida al capitán Haddock), y que tiene entre sus medallas los logros de “Avatar”, “Distrito 9”, “El origen del planeta de los simios” y la actualmente en pleno rodaje “El Hobbit”).

Robert Zemeckis estará tirándose de los pelos. Lo que durante años ha intentado con “Polar express” (2004), “Beowulf” (2007) o “Cuento de navidad” (2009) lo ha conseguido Spielberg asociándose con Jackson de un plumazo, así que no hay que subestimar un producto que sí, es de entretenimiento, pero que lleva a sus espaldas años de esfuerzos. Atención a la nominación casi segura de la película en el apartado de mejor film de animación en los próximos óscars (de momento sabemos por la preselección que competirá con “Rango”, “Rio”, “Cars 2” y si tenemos suerte con las españolas “Chico & Rita” y “Arrugas”).

Ya que hablamos de los aspectos técnicos de la animación decir que ésta no es perfecta, que aún deben evolucionar la gesticulación de rostros (véanse lo rígidos que resultan por ejemplo Hernández y Fernández) o ciertas texturas (véase el pelaje de Milú), pero que teniendo en cuenta que estamos hablando de trabajos pioneros el acabado es excepcional. Me ha sorprendido mucho el diseño facial de Tintín, con un rostro y una mirada que hace que enseguida te caiga bien el personaje, aunque diste del dibujo en 2D de Hergé (atención por cierto al guiño que se hace al comienzo de la película cuando vemos en un mercadillo los retratos en 2D de los personajes en 3D en un puesto en el que se encuentra el mismísimo Hergé en una suerte de homenaje); pero sobretodo la fantástica recreación espacial de ambientes y lugares, potenciada por una cámara de Spielberg que se mueve de manera inverosímil por ellos logrando siempre el plano o travelling más espectacular (véanse las persecuciones en esos falsos “planos secuencias” absolutamente magníficos e imposibles de ver en ninguna otra película). Vamos, que si alguna vez ha tenido sentido la animación y el 3D es ésta, que permite que veamos algo que no se podría filmar de ninguna otra forma, un poco en la línea que ya proponía James Cameron con “Avatar”.

Sobre la adaptación en sí del cómic (y esta vez sí puedo hablar con conocimiento de causa porque me confieso tintinófilo de pro) me parece acertada, aunque evidentemente se han hecho modificaciones para fundir en un solo argumento tres historias: De “El cangrejo de las pinzas de oro” el guión rescata el primer encuentro de Tintín con el capitán Haddock a bordo del Karaboudjan y parte de la aventura en África y de “El secreto del Unicornio” y “El tesoro de Rackham el rojo” toma prestado el motivo principal del argumento, un botín pirata tras el que se ponen Tintín, el capitán Haddock y un tercer personaje del no voy a hablar para no destripar nada y que es el gran “malo” de la función.

El arranque de la película me parece sencillamente perfecto tanto por esos magníficos títulos de crédito herederos de los de Saul Bass y en la línea de los de “Atrápame si puedes”igualmente subrayados por la juguetona partitura de John Williams (genial como siempre) como por esa inmersión dentro del mundo de ficción de la película a través del mercadillo parisino (Montmatre supongo) que rebosa luminosidad y encanto. Todo lo que viene a continuación relativo a la investigación de las pistas del tesoro y de la persecución del carterista me parece francamente conseguido aunque me han comentado que esa parte es la menos entretenida y que lo verdaderamente divertido es todo lo que acontece cuando entra en escena el capitán Haddock (sin duda es el personaje favorito para mucha gente, incluso más que el propio Tintín, que a mucha gente le resulta excesivamente impecable en su proceder).

Spielberg y Jackson han llevado a cabo un magnífico trabajo de puesta en escena, planificando con gran sentido del espacio y el dinamismo cada una de las escenas hasta el punto de que resulta difícil recordar una película de aventuras y acción que resulte tan apasionante desde el punto de vista visual…y estamos de enhorabuena porque lo que ya es seguro es que la colaboración se repetirá al menos una vez, en una continuación en la que Jackson hará las veces de director y Spielberg las de productor, de nuevo con la financiación de Paramount y Sony Pictures….aunque permítaseme que dude de las atribuciones estancas, vamos, que pienso que los dos rodarán y producirán.

Lo único que no me convence del todo son los añadidos, tanto las ensoñaciones de Haddock sobre Rackham el rojo (aunque siendo tales podemos pasar todo lo inverosímil que vemos hacer a los dos navíos), como todo el tramo final, hecho por y para el público y basado en eso que tanto está perjudicando a muchos directores que consiste en incluir una escalada de acción rizando el rizo a costa de lo posible y lo lógico. En esta ocasión a Spielberg le ha pasado un poco lo que le pasó con el final de la cuarta entrega de Indiana Jones y es que por mostrarnos las escenas de acción más espectaculares perjudica la coherencia interna de su relato ¿de verdad eran necesarias muchas de las cosas inverosímiles que se ven en la persecución de la ciudad africana? ¿era preciso el enfrentamiento con grúas en el puerto? Sin duda esta película es trepidante de principio a fin y se ve en un suspiro, pero no por ello el final ha de salirse del tiesto y para mi gusto el final es innecesario por excesivo. Estoy convencido que se puede dar muchísima emoción a una escena de acción sin recurrir a alambicadas sucesiones de casualidades que lo único que hacen es hacernos salir de la ficción misma.

Sea como fuere está claro que es una película altamente recomendable para pasar un buen rato, máxime cuando se acercan las fechas navideñas y la escusa puede ser llevar a los más pequeños de la casa, pero no nos engañemos, estas películas ya no se hacen solo para ellos y podemos disfrutarlas todos independientemente de la edad que ponga en nuestro DNI. En realidad Tintín nunca ha sido sólo un producto infantil, sino en todo caso juvenil o para todas las edades y eso es precisamente lo que nos han regalado Spielberg y Jackson, una película de aventuras y acción para todos. Lo mejor es disfrutarla.

Por cierto, me doy cuenta que de Jaime Bell “(Billy Elliot”) o de Daniel Craigg no he hablado nada, pero lo cierto es que sus presencias son casi anecdóticas dado que no se “ven”, aunque cumplan…El futuro de parte del cine es ese. Podremos ver en pantalla a cualquiera aunque los interpreten otros….Es el gran sueño que intuyo siempre ha tenido Robert Zemeckis, resucitar a Marilyn Monroe, a Humphry Bogart, a Cary Grant, a Marlene Dietrich, Katherine Hepbrun y Gary Cooper….Todo se andará.