ECC Ediciones nos trae un cómic de los años setenta creado por el argentino Carlos Trillo y el uruguayo Alberto Breccia. “Nadie” es un espía al servicio de la inteligencia británica que será convocado para resolver por la vía rápida todo tipo de misiones. Desmontemos este clásico de la aventura.

A finales de la década de los 70, Alberto Breccia y Carlos Trillo firmaron una clásica historia de aventuras. Nadie, personaje protagonista que da título a la obra, es un espía está al servicio de la inteligencia británica que se ve envuelto en todo tipo de misiones: en los 14 capítulos recopilados en este volumen, tendrá que echar mano de sus variados recursos para neutralizar diversas amenazas, siendo la más letal el maquiavélico Fu Manchú. Un álbum trepidante, en el que vuelve a quedar patente la química creativa compartida por los autores de Un tal Daneri, Buscavidas, Había otra vez… El lado oscuro de los cuentos infantiles o Viajero de gris.

Carlos Trillo y Alberto Breccia se entienden a la perfección. Lo demuestran en varios trabajos que han realizado conjuntamente, como la antología de cuentos de “Había otra vez“, publicada por ECC Ediciones, donde estos autores retuercen perversamente narraciones populares infantiles. Otro de sus logros comiqueros es “Buscavidas“, protagonizada por un extraño colector de confidencias. La misma editorial también nos ofreció “Un tal Daneri“, la primera colaboración de estos autores. Alberto Breccia también tiene un protagonismo importante en el catálogo de ECC con su propia colección de obras disponibles en librerías de un tiempo a esta parte.

A finales de los años setenta, Breccia y Trillo resolvieron colaborar para sacar a la luz un nuevo personaje emparentado con los agentes secretos que años atrás habían puesto de moda las películas de James Bond. Se publicó en una revista antológica llamada “Tit-Bits“. Extraño nombre para una publicación argentina fundada en 1909 y cuya primera andadura duró hasta 1957. Se trataba de una versión de otra publicación inglesa del mismo nombre. Ediciones Récord la retomó entre 1975 y 1982, año de su cierre. Setenta y cuatro números con un añadido de varios más en una tercera época durante 1991.

Alberto Breccia había colaborado en “Tit-Bits” adaptando una aventura de Emilio Salgari en “Los estragos de China” y un relato de Arthur B. Reeve en “La mano que aprieta“. Tras el éxito de la película “La espía que me amó” con Roger Moore, la editorial se mostró entusiasmada en alojar las aventuras del espía calvo de nombre desconocido. “Nadie“, que así lo llaman (en capítulos posteriores descubriremos su nombre de pila) trabaja al servicio del contraespionaje británico y su papel consiste en realizar misiones que no pueden ser registradas ni aparecer en un papel oficial.

Como bien apunta Álvaro Pons en el prólogo, en este personaje se mezclan varias ramas del prototipo de espía, inspirándose en varias series y películas recordadas por los aficionados. Si bien tiene algo de James Bond, sus acciones recuerdan más a las del protagonista de “Misión imposible“, la popular serie televisiva de los sesenta que Tom Cruise y su saga ha convertido en blockbuster. Otra influencia de “Nadie” es el del cine satírico de espías con nombres propios como Flint (James Corburn) o Matt Helm (Dean Martin). El sentido del humor de “Nadie” no es muy evidente. Sí en cambio lo es en su ayudante ocasional ‘Payaso’, todo un acierto del guionista para proponer divertidos diálogos entre los dos agentes.

La saga de “Nadie” está compuesta de episodios de unas doce páginas, que bastan y sobran para relatar una misión que a menudo acaba de mala manera para alguno de los implicados. El jefe del servicio secreto residente en Londres es Frederick Master, que no dudará en poner a Nadie en peligro e incluso en venderlo al enemigo en su propio interés y la salvaguarda del imperio británico. Las historias resultan entretenidas en un primer momento. Curiosas es la palabra. Hacia mitad del libro la cosa se pone interesante al rescatar los autores a un villano popular creado por el escritor Sax Rohmer en 1913. Se trata de Fu Manchú, que ha aparecido en multitud de cómics y películas fuera de sus novelas. Aquí lo vemos con el rostro deformado que le confiere un aspecto terrorífico. Desde su aparición, las aventuras de Nadie se interconectan y hasta gozan de continuará entre unas y otras. También aparece una figura femenina, Lizeth, que no se muestra y que supone el amor verdadero del espía. Es capaz de ponerse en serio peligro por ella. Una carta que usará Fu Manchú para atraerlo a sus trampas.

Nadie” me ha resultado tremendamente entretenida. El trazo nervioso del dibujante, en sus ilustraciones en blanco y negro, puede echar atrás a lectores jóvenes, pero que no se equivoquen, es un estilo realmente elaborado y sugerente. Me parece un autor tremendamente expresivo y dinámico, con una narración secuencial muy buena. Solo por él merece la pena este tomo, que ECC ha adaptado de la versión argentina publicada por Doedytores. Lo ha hecho en un tamaño ideal y con un buen papel.

En definitiva, “Nadie” es una obra menor de Carlos Trillo y Alberto Breccia pero realizada con honradez. Además, es un entretenimiento mayúsculo. No la dejen pasar.

Nadie
Guión: Carlos Trillo
Dibujo: Alberto Breccia
Fecha de publicación: Diciembre de 2021
ISBN: 978-84-18974-83-0
Formato: 22×29,5cm. Cartoné. Blanco y negro
Páginas: 176
Precio: 19,95 euros