Seguramente habréis visto alguna que otra tira de uno de los webcomics más populares del mundo: Cyanide and Happiness, pues bien, desde hoy podéis encontrar a la venta un libro, Cyanide and Happiness: Zoo de golpes, que recopila algunas de sus mejores historietas, presenta 30 inéditas y una breve, y divertida, historia del tipo “Elije tu propia aventura”. Os va a encantar.

portada_cyanide-and-happinnessCyanide and Happiness: Zoo de golpes
Edición original: Cyanide and Happiness: Punching Zoo USA
Guión: Kris, Rob, Matt & Dave
Dibujo: Kris, Rob, Matt & Dave
Color: A color
Formato: Libro rústica, 200 págs. a color.
18,95€

Recopilación de las tiras cómicas más irreverentes y corrosivas de Cyanide and Happiness, el webcómic que triunfa en internet. No cabe duda de que este libro resultará ofensivo, pero no para la gente que lo compre.

Aquí los autores (Kris, Rob, Matt & Dave) se mofan sobre cualquier tema, desde la maternidad, pasando por el sexo, la religión, el alcoholismo, las drogas, la muerte o las enfermedades. Incluye, además, 30 HISTORIETAS NUEVAS y “Cita cachonda” ¡para que te corras tu propia aventura!

SOLO PARA ADULTOS. NO APTO PARA PERSONAS SENSIBLES.

Cyanide and Happiness es una web serie de humor, eso sí, tiene un humor muy políticamente incorrecto, un humor de esos que levanta ampollas y que Kris Wilson creó, primero en StickSuicide y después en Explosm.net contando ya con la colaboración de los webmasters Rob DenBleyker, Matt Melvin y Dave McElfatrick. La serie se volvió viral y en la actualidad ya hay cinco álbumes que recopilan algunas de las mejores tiras, se traduce a varios idiomas en el mundo, cuenta con millones de fans y por fin ha llegado a España oficialmente.

Me sorprendió un poco que Planeta Cómic se decidiese a publicar Cyanide and Happiness: Zoo de golpes, siendo justos este es el cuarto álbum de la serie por orden de publicación (como si hubiese algún otro ordenamiento posible, aunque imagino que habrán optado por este por aquello del mejor acabado), así que Planeta Cómic podría publicar también Cyanide and Happiness (2010), Ice Cream & Sadness (2010), Depressing Comic Book (2012) Punching Zoo (2013, “Zoo de golpes”) y Stab Factory (2015), os aseguro que yo no me quejaría precisamente.

Eso sí, hay que tener en cuenta que Cyanide and Happiness: Zoo de golpes está repleta de tiras donde se desborda ironía, vulgaridad, chistes soeces, tabús… todo vale, y es que la gracia de las tiras de Cyanide and Happiness está, precisamente, en ir más allá de los límites, en reírse con chistes vulgares que atentan contra las buenas costumbres. Es un humor adulto y muy particular que, posiblemente, no gustará a todo el mundo aunque sí a los más de un millón de visitas que recibe, semanalmente, la página web de Cyanide and Happiness.

Por cierto, aprovecho para contaros que Cyanide and Happiness toma su nombre de una tira en la que un personaje está vendiendo de algodón de azúcar hecho de cianuro y felicidad, naturalmente el otro personaje responde: “¡¿Felicidad? ¡Rayos! Compraré cuatro” (o al menos eso asegura la Wikipedia, por cierto, hacer un donativo para que siga online).

Naturalmente el dibujo en Cyanide and Happiness es lo de menos, aunque eso no evita que Kris Wilson, Rob DenBleyker, Matt Melvin y Dave McElfatrick no dibujen personajes expresivos, cómplices incluso del lector. Aún así lo importante, siempre, es el mensaje, pillar un chiste que nos arrancará carcajadas, si conseguimos no oir a la vocecilla que nos dice “reírse de eso no está bien” ¿Yo? Tranquilos, ya la tenía en silencio.

Además de las 30 tiras inéditas Cyanide and Happiness: Zoo de golpes incluye una pequeña historia al estilo “Elije tu propia aventura”, un divertimento llamado “Cita cachonda” que te demostrará que en Cyanide and Happiness no hay salidas fáciles… pero siempre hay humor fácil, negro y perturbador.

Desde aquí aprovecho para felicitar a Planeta Cómic por su decisión de publicar Cyanide and Happiness: Zoo de golpes, espero que pronto nos ofrezcan nuevo material. Aunque, recordad, es humor negro, no es para mentes no-adultas… ni para mentes sensibles.