No me acaba de quedar claro desde qué día de agosto ya se puede adquirir “Canallas“, la antología de relatos dirigida por George R.R. Martin (si alguien no sabe quién es que se lo haga mirar) ya está a la venta en castellano, más de 1.100 páginas con algunos de los nombres más destacados de la fantasía anglosajona que, con motivo de la llamada de Martin, han escrito relatos cortos centrados en canallas y ambientados, en algunos casos, en sus universos de fantasía más conocidos… pero tú lo que quieres es que te asegure que en “Canallas” hay material inédito de Juego de Tronos/Canción de Hielo y Fuego, ¿verdad? Así es, en este libro publicado por la editorial Llibres de l’Encobert podréis encontrar “El príncipe canalla“, aunque también historias de autores tan respetados como Joe Abercrombie, Daniel Abraham, Scott Lynch, Neil Gaiman o Patrick Rothfuss.
No sé cómo lo veis vosotros, pero treinta euros por más de mil páginas en cartoné no me resulta un precio excesivamente caro, lo que sí me choca es que esta antología haya caído en las manos de una editorial semidesconocida que ha tenido el acierto de ¿moverse más rápido? ¿pagar un pastizal por los derechos? ¿chantajear al dueño de los derechos internacionales? Sea como sea Llibres de l’Encobert por fin ha sacado a la venta Canallas, ahora sólo me falta encontrar tiempo para leerlo.

Canallas
Connie Willis, Walter Jon Williams, George R.R. Martin, Michael Swanwick, Neil Gaiman, Daniel Abraham, Steven Saylor, Scott Lynch, Joe Abercrombie, Patrick Rothfuss, Joe R. Lansdale, Carrie Vaughn, Cherie Priest, Lisa Tuttle, Bradley Denton, Paul Cornell, Gillian Flynn, Matt Hughes, David W. Ball, Garth Nix, Phyllis Eisenstein
ISBN: 9788469788714
Tapa dura con sobrecubierta
Ed. Llibres de l’Encobert
1112 páginas
29.95 €
Antología inédita en el estado español sobre canallas. Incluye “El príncipe canalla”, precuela inicial de Juego de Tronos (George RR Martin) y otras historias de autores consagrados como Joe Abercrombie, Scott Lynch, Neil Gaiman o Patrick Rothfuss.
-Todo el mundo ama a un canalla (Introducción) por George R.R. Martin
-Tiempos duros siempre de Joe Abercrombie
-¿A qué te dedicas? de Gillian Flynn
-La posada de las Siete Bendiciones de Matt Hughes
-El árbol torcido de Joe R. Lansdale
-Bruna Enaguas de Michael Swanwick
-Procedencia de David W. Ball
-Los turbulentos años veinte de Carrie Vaughn
-Un año y un día en la antigua Theradane de Scott Lynch
-Dura como el metal de Bradley Denton
-Metal pesado de Cherie Priest
-El significado del amor de Daniel Abraham
-Una forma mejor de morir de Paul Cornell
-Mal vistos en Tiro de Steven Saylor
-Una carga de marfiles de Garth Nix
-Diamantes de tequila de Walter Jon Williams
-La caravana a ninguna parte de Phyllis Eisenstein
-El curioso caso de las esposas muertas de Lisa Tuttle
-Como el Marqués recuperó su abrigo de Neil Gaiman
-Una tarde de cine de Connie Willis
-El árbol del relámpago de Patrick Rothfuss
-El Príncipe pícaro o el hermano de un Rey de George R. R. Martin
Sea como sea, la edición es una basura.
La calidad del papel es mala; la traducción no sé cómo será pero echándole un ojo por encima veo que en lugar de usar la “raya” para los diálogos han empleado el signo de “resta”; y para colmo, mi ejemplar al menos viene con el taco de hojas despegadas de la parte del lomo de la tapa dura.
Que ya sabemos que en ejemplares de tantas páginas, y tapa dura, no es raro que se despeguen un poquito, pero otra cosa es que se despegue tantísimo, y se vean dentro del hueco los manchurrones de cola…. dejando claro que o no se pegó bien, o se ha soltado, en cualquier caso la calidad es bastante mala.
30 € por mil y pico páginas no lo vería mal, si la calidad no fuese tan mala. El libro es papel de fumar, habrá que leerlo pronto porque encima el papel es de ese que la tinta a veces no coge bien y las palabras pueden aparecer emborronadas (no me extrañaría toparme con algunas así), y en cualquier caso, desaparece (la tinta) con el tiempo.
No es papel de novela típico, vamos… es papel de “libros autoeditados”.
La calidad que tiene es esa: la de una autoedición. Y 30 € por esto me parece una tomadura de pelo. Pero lo que me duele no es el precio, sino la calidad. Si me dicen que el libro cuesta 40 €, pero la calidad hubiese sido LA NORMAL y esperable, con gusto los hubiera pagado.
Supongo que esto es lo que pasa cuando se mezclan ideologías sectarias, con cómo llevar un negocio: mala calidad y rechazo de los clientes.
Ya en su página de Facebook se les veía el plumero progre, podemita y nacionalista valenciano.
Y claro… han querido sacar dos ediciones del mismo producto, una en castellano y otra en valenciano que no lo va a leer ni su puta madre (porque hasta los valencianos lo prefieren en castellano; como mucho habrán vendido 100 ejemplares en valenciano… o ni eso).
Algo completamente absurdo, porque al final estás provocándote el doble de gastos para obtener los mismos beneficios…. Por tanto, tienes PÉRDIDAS. ¿Y de qué manera puedes mitigar dichas pérdidas, provocadas por tu sectarismo independentista y nacionalista?… Pues simplemente bajando la calidad de la edición…. que es lo que ha pasado.
Y espero que tal pésima calidad se haya dado en las dos ediciones, porque como lo hayan hecho sólo en la edición en castellano, y la edición en “valencià” la hayan sacado con calidad normal, es para meterlos a la cárcel.
Poco futuro le veo a esa desconocida y pequeñísima editorial con ese proceder.
Adriano, lo que comentas sobre la calidad de la edición es interesante, pero lo que no tiene cabida es que lo lleves al lado político. Cada cual, en su casa, puede hacer lo que quiera y posiblemente la edición en valenciano haya sido mediante subvención (lo que ayudará a la edición en castellano).
La calidad del papel viene condicionada por el número de páginas y el peso de éstas, puede ser que para no presentar un libro de 3 kilos hayan optado por un papel más ligero.
Más interesante me parece comparar la edición en valenciano con la edición en castellano. Aún no lo he tenido en mis manos, pero me choca que sea de una calidad tan mala como comentas.
Tendré que ir a verlo a una librería…
Saludos.
Verás que es la editorial la que lo ha llevado al lado político.
Carecen de web, se sirven del FaceBook; en el cual además hacen gala de su favoritismo hacia la cuestión nacionalista catalanista. No culpes al niño que señala hacia el Rey desnudo 😉
Ojo, a ver si nos entendemos… a mí me da igual que sean independentistas, comunistas, fascistas, etc. Por mí como si defienden que la Tierra es plana…. A mí lo que me afecta como cliente y lector es la calidad de la edición.
Ahora, si dicha calidad se va a ver mermada por las ideologías personales de unos…. claro que me voy a quejar.
Si mañana bajo al bar de mi calle y pido una hamburguesa, y cuando me la traen veo que es una hamburguesa de algas, y al preguntar que dónde está la carne se niegan a servírmela porque los dueños se han vuelto veganos…. claro que me va a molestar.
Con una gran diferencia: en ese caso yo puedo levantarme de la mesa e irme a otro bar, para no volver a ese.
En el libro… no. Porque ESA editorial ha comprado los derechos para editarlo, por tanto una vez me llega el ejemplar y veo su penosa calidad, no me queda otra que joderme, y no puedo irme a otra editorial a comprar dicho libro pero con una mejor edición.
Que la editorial tiene un marcado tinte político no se puede negar, tanto como que a mí me da lo mismo. Pero si eso va a repercutir en la calidad del producto que voy a comprar, y que ellos se han hecho con los derechos para ser los únicos que puedan ofrecerlo, entonces claro que me voy a quejar.
Es indudable que (y más siendo una editorial pequeña) si pretendes hacer el DOBLE de gastos, para obtener los mismos beneficios (o incluso menos… porque quizá no hayan vendido todos los ejemplares de la edición en valenciano que han hecho), es indudable que eso repercutirá en el beneficio económico, y por tanto…. para que este no se vea repercutido, se optará por descender costes en otra parte.
A mí me parece genial que se publiquen obras en valenciano, catalán, gallego, euskera… Lo apoyo totalmente. Siempre que eso no repercuta en la calidad de la obra. Porque entonces estamos poniendo por delante del raciocinio el sentimentalismo fanático.
Si una editorial quiere hacer una edición en valenciano de una novela, me parece estupendo; incluso puedo aceptar que la saque al mercado antes que su edición en castellano (para así tratar de que se venda, y por tanto difundir, la obra en valenciano). Pero si la editorial hace esto debe ser sin repercutir la calidad de la obra en sí.
Si no al final, por nacionalismo fundamentalista, ¿qué tenemos? ¿Dos ediciones (valenciano y castellano) de una misma obra, que son de pésima calidad, porque la obra ha costado el DOBLE de editarse que una obra normal?
Te aseguro que ningún lector en valenciano ni en castellano querría menor calidad… a cambio de contentar el sectarismo de una minoría. (y esto, repito, suponiendo que la “mala calidad” se haya dado en ambas ediciones….. Porque de fanáticos nacionalistas ya no me sorprende nada; igual la edición en valencià tiene mejor calidad….).
Porque si yo entiendo euskera, a mí me da lo mismo que la obra esté en castellano o en euskera; lo que me importa es que tenga el mínimo de calidad esperable. Y si no va a tener ese mínimo, por emperrarse la editorial en gastar el doble editando la obra en castellano y en euskera…. pues prefiero que la editen en la lengua que compartimos TODOS (castellano), pero que al menos salga con buena calidad. Y ya si en el futuro la editorial obtiene bastantes beneficios y quiere, que editen la obra en euskera, catalán, gallego o quenya….
Si la editorial piensa hacer ese doble gasto absurdo, se supone que es porque la editorial dispone del dinero para ello. Pero no porque vaya a quitar ese dinero de la calidad de la obra….
Y una editorial tan pequeña como esta, no debería haberse guiado por ideologías personales, por encima del raciocinio y la calidad a ofrecer a sus clientes. Porque lo que han conseguido es hacer una obra de mala calidad (la edición, el papel y la tinta, son propios de libros de autoedición de baja calidad).
El tamaño de letra es pequeñísimo; el papel no es el normal de las novelas sino el de libros autoeditados que al cabo de un tiempo se va borrando la tinta; el cartón de la tapa dura viene por dentro con arrugas y se despega con facilidad; las hojas están por el lomo despegadas del lomo de la tapa, dejando un hueco bastante grande y exponiéndolas a desilacharse en breve; la propia escritura del texto hace a uno plantearse si se han encargado profesionales (¿en serio usan el signo de “menos” en lugar de la “raya de diálogos”?).
Eso no es una apreciación personal, eso es una objetividad constatable.
Y si ese estropicio se debe a los idelaes políticos de la editorial…. claro que me quejo. Del mismo modo que si mañana el cine español le da por hacer una película de Iron Man, y por destinar presupuesto a su traducción al euskera, gallego, catalán, valenciano y bable…. Iron Man acaba teniendo que llevar armadura de cartón.
Con decirte que conforme recibió el libro mi librería habitual, se lo llevé al día siguiente para que lo devolvieran a la editorial….. Y estoy a la espera de otro ejemplar. A ver si la mitad de las pegas que menciono son “algo puntual del ejemplar que me ha llegado a mí”.
Por desgracia no todas lo serán: el tamaño de la letra, la mala calidad del papel….
Un saludo.
A ver, sigo diciendo que lo de la política no tiene cabida ni en la web ni en el análisis del trabajo de una editorial. He etado repasado un poco su muro y no veo nada más allá que la defensa del valenciano que pueda consdirarse “político”, siempre ha sido algo “cultural”, pero gracias a la intoxicada situación que vivimos en España ahora ha pasado a calificarse de “político” el defender tu lengua.
Como te decía, no he visto aún la edición en castellano, pero me cuesta creer que sea tan mala (empezaré a buscar más opiniones, pero aún no he visto ninguna como la tuya). Aún así lo del encolado se resuelve cambiando el tomo en la librería.
Ah, la web de la editorial está aquí: http://www.valenciaimmaterial.com/categoria-producto/llibres/
Me compré no hace mucho este libro y, la verdad, tengo que estar de acuerdo a medias con los que critican la edición.
Por el lado físico creo que he tenido suerte ya que no está demasiado mal. La tapa tiene un pequeño golpe en la zona inferior, pero puede ser cosa del transportista o de la librería, vale. Por dentro, el papel es de buena calidad, gordo las tapas vienen bien pegadas al tocho.
Creo que haber conseguido una buena edición ha dependido de que he tardado algunos meses en comprarme el libro y la editorial parece haber subsanado algunos problemas.
En el tema traducción no puedo decir demasiado ya que aún no he empezado a leerlo. Lo que sí he visto es que en el relato de Rothfuss han dejado la posada Waystone tal cual, cuando con un trabajo de investigación de medio segundo (mirar la primera página de El nombre del viento) hubiera descubierto que en español es Roca de Guía.
Ahora, hay cosas que sí me chirrían:
Las rayas (en mi edición sí usan la raya para marcar los diálogos) a veces va pegada a las letras, otras está separada como si fuera una lista.
La mitad de las páginas están alineadas a la izquierda mientras que la otra mitad están justificadas.
El traductor usa como salto de escena dos asteriscos, tres asteriscos, un asterisco o un salto de dos líneas indistintamente, incluso dentro de un mismo relato.
El espaciado entre párrafos es, para mí, demasiado. Es casi una línea entre cada párrafo. Creo que habría podido ahorrarse papel solo juntándolos un poco más.
Y por cierto, no creo que la edición tenga nada que ver con si la editorial es podeita, pepeísta o jesuíta.
Gracias por tus comentarios, ahora sí que me estáis incitando a hacerme con un ejemplar… en cuanto mi cuenta corriente mejore un poco su salud. Pero es que son 28,50 euros… si de aquí a finales de enero no llega ningún gasto más (aparte de autónomos) picaré y haré una reseña sobre Canallas.