El 8 de septiembre de 1966, a las 20:30 horas, se estrenaba “Star Trek” en las televisiones de los EE.UU. La serie de televisión creada por Gene Roddenberry ha permitido a varias generaciones viajar al espacio, la última frontera, acompañando a la nave estelar Enterprise, en su misión permanente de explorar nuevos y desconocidos mundos, de buscar nuevas formas de vida y nuevas civilizaciones, de ir audazmente donde nadie ha ido jamás.
Las adaptaciones a la gran pantalla de esta serie de televisión han sumado, hasta ahora, un total de trece películas que se han estrenado en los cines de todo el mundo desde 1979 hasta 2016. Desde “Star Trek: The Motion Picture” hasta “Star Trek: Beyond” hemos podido disfrutar de las tres precuelas de J.J. Abrams, las seis películas con la tripulación de la serie original y las cuatro con ‘The Next Generation’. ¿La mejor? Posiblemente “Star Trek II: La ira del Khan“, pero aceptamos discrepancias y estamos abiertos al debate.
De la mano del genio J.J. Abrams nos llegó en el año 2013 “Star Trek: En la oscuridad” (“Star Trek: Into the darkness“), la duodécima película de la saga y la segunda bajo su batuta. Era la secuela de su primer ‘reboot‘, una propuesta muy original que redefinió el universo Star Trek para una nueva generación, con gran éxito de crítica y público, de manera que una secuela era algo inevitable.
Con un reparto encabezado por Chris Pine, Zachary Quinto, Zoe Saldana, Simon Pegg, Karl Urban o Anton Yelchin, que ya formaron parte de la tripulación de la nave U.S.S. Enterprise de la película precedente, al que se sumaron nuevas incorporaciones de peso como Alice Eve y el Sherlock Holmes televisivo y el Doctor Strange de Marvel Studios Benedict Cumberbatch, “Star Trek: En la oscuridad” nos contó como la tripulación de la nave Enterprise se enfrentaba a John Harrison, un ex-miembro de la Flota Estelar que sumía en el caos el planeta tras un elaborado atentado contra el cuartel general de la Flota Estelar de la Federación de Planetas Unidos, en San Francisco, que acababa con los principales dirigentes y oficiales, incluyendo al almirante Christopher Pike. Con un asunto personal que resolver, el capitán Kirk encabeza una incursión a un planeta en el espacio klingon para capturar a Harrison, que no es quien parece ser. A medida que nuestros héroes se van sumergiendo en una épica partida de ajedrez a vida o muerte, el amor se verá puesto a prueba, las amistades se romperán, y habrá que hacer ciertos sacrificios por la única familia que le queda a Kirk: su tripulación.
Como todo el mundo ya sabe, el John Harrison del polifacético Benedict Cumberbatch era, en realidad, Khan Noonien Singh. El mítico villano, un superhombre creado genéticamente en el siglo XX, ya había aparecido en un capítulo de la primera temporada de la serie original y era también el villano de la función en la segunda entrega de la saga cinematográfica, “Star Trek II: La ira del Khan” dirigida por Nicholas Meyer, en la que reaparecía, abandonado junto a sus seguidores en un inhóspito planeta desde donde tramaba su venganza contra James T. Kirk. En ambos caos Khan fue interpretado por Ricardo Montalbán. Por lo tanto esta película, puesto que era una precuela, significó el primer encuentro entre Khan y Kirk.
A ver, yo entiendo que estafa es cuando te quedas tú el dinero, no cuando el dinero es un donativo…