Filibusteros, corsarios, bucaneros,… ¡Piratas! No hay símbolo más representativo de uno de los periodos más exóticos y emocionantes de la historia, la vida en libertad y repleta de aventuras, y la anarquía frente al orden establecido que los tripulantes de los barcos que lucían la ‘Jolly Roger’, la bandera pirata de los huesos y la calavera. Hoy son mitos, pero fueron personajes de la historia, de leyenda y de cuento como Barbanegra, Jack Sparrow, Henry Morgan, Francis Drake, sir Walter Raleigh, Long John Silver, Calicó Jack,… y los Campbell. ¡Al abordaje!
¡En casa de Los Campbell la piratería es un asunto de familia! Una verdadera leyenda entre los filibusteros, Campbell dejó el negocio tras el asesinato de su mujer para así criar a sus hijas en paz, lejos de dolorosos recuerdos. Pero el pasado siempre vuelve…
Las aventuras épicas de piratas de corazón noble, las batallas navales entre los barcos de los filibusteros y los navíos cargados de tesoros que cruzaban el Atlántico, los puertos francos en las islas del Caribe donde los corsarios retoman fuerzas, los antros turbios y oscuros donde el ron corren de vaso en vaso, los romances entre piratas y señoritas de alta alcurnia que caen rendidas a los pies de los pícaros delincuentes de los mares del sur, la bandera negra Jolly Roger con una calavera cruzada por huesos en blanco ondeando en lo alto del palo mayor, la búsqueda de tesoros enterrados en islas pobladas por indígenas hostiles, viejos capitanes con pata de palo que traman traciones y motines,… ¡Cuantas aventuras no han ofrecido las historias de piratas! Desde la literatura, con “La Isla del Tesoro” de Robert Louis Stevenson o “Sandokan” de Emilio Salgari, hasta el cine, con los clásicos de Errol Flynn, Douglas Fairbanks, Burt Lancaster o Tyrone Power como “El Capitán Blood”, “El Cisne Negro” o “El Temible Burlón”.
Pero, en los últimos años y hasta la irrupción de los “Piratas del Caribe” de Disney, las aventuras con y sobre piratas estaban bajo mínimos. Era díficil encontrar libros o películas con las clásicas historias de piratas, de saqueos y de rapiña, de combates navales y de huidas a toda vela, de esclavos y prisioneros, de naufragios y tormentas desatadas, de velas hinchadas por el viento y de la espuma del mar salpicando la camisa desabrochada del timonel. No se puede considerar a “Hook” de Steven Spielberg con su malvado Capitán Garfio o “Los Goonies” de Richard Donner como películas del género, y las que se ajustaban a la definición resultaron ser sonados fracasos de taquilla, como las fallidas “La Isla de las Cabezas Cortadas” de Renny Harlin o “Piratas” del mismísimo Roman Polanski. Pero la serie de “Piratas del Caribe” con su Jack Sparrow al frente, al margen de la calidad del producto del publico potencial de la misma, ha sido un soplo de aire fresco. El género ha renacido. En todos los frentes, incluyendo el cómic, como puede constatarse con la reciente reedición de “Bruce J. Hawker” de Vance y Duchâteau, la adaptación de “La isla del tesoro” de Hugo Pratt, “Long John Silver” de Xavier Dorisony Mathieu Lauffray, o la serie “Barracuda” de Jean Dufaux y Jérémy Petiqueux, entre otros muchos.
Hace aproximadamente un año pudimos disfrutar con “Los Campbell: Inferno” de José Luis Munuera, la primera entrega de una serie repleta de humor, aventura, un punto de tristeza nostálgica, relaciones familiares y, por supuesto, piratas donde tuvimos el placer de conocer a Campbell, una leyenda de la piratería que se retiró del negocio tras el asesinato de su mujer. En su nueva vida cuida de sus dos hijas, la adolescente Ginebra y la pequeña y revoltosa Itaca, lejos de los dolorosos recuerdos del pasado, pero éste siempre regresa para cobrarse sus deudas y recordarte todos los errores que dejaste atrás. “La piratería es como el ron”, dice el Turco. “Nunca se deja del todo”.
Y un año después nos llega este “Los Campbell: El temible pirata Morgan” con la misma premisa argumental: Campbell reside en una pacífica y aislada isla del Caribe, la isla de leprosos de Bakaloo, acompañado solamente por sus dos hijas, su sensual vecina Nutel·la y sus recuerdos. Unos recuerdos repletos de emociones y abordajes, junto a su hermano y el resto de la tripulación de piratas, la rivalidad con el temible pirata Morgan, donde su amada Fanny ocupa un lugar relevante. En cualquier momento, en cualquier lugar, el rostro de su esposa asesinada regresa a la memoria de Campbell en forma de ‘flashback’ para dibujarle una sonrisa triste en el rostro. Como la conoció, como se enamoró,… y como descubrió su oscuro secreto.
A su vez, como contrapunto humorístico y desenfadado, Munuera nos acompañará hasta las húmedas y profundas celdas del palacio Piranesi (un guiño a la colección de grabados del artista italiano Giovanni Battista Piranesi conocidas como ‘Carceri d’Invenzione’) para vivir los esfuerzos del pirata Carapepino y su compañero Haggins para escapar de su encierro gracias a la ayuda de lady Sophia de Hollowside mientras en el exterior, el infame gobernador Inferno (el hermano malvado de Cambell, pirata reconvertido en noble) vive su particular historia de amor… por conveniencia.
El prolífico autor de “Los Campbell”, el murciano José Luis Munuera (Lorca, 1972), acumula ya más de veinte álbumes de historieta publicados en Francia, incluyendo sus primeros trabajos con Joann Sfar (tres tomos de “Les Potamoks”, cuatro de “Merlin”,…) y Jean-David Morvan (quince álbumes de “Nävis”, “Merlin” a partir del quinto tomo, “Sir Pyle S. Culape”, cuatro magníficos álbumes de “Spirou y Fantasio”,…). En los últimos años ha colaborado con autores de la talla de Enrique Bonet (en “El juego de la luna”, por el que fue seleccionado en el Salón del Cómic de Angouleme y premiado por votación popular como Mejor obra de autor español del Salón Internacional del Cómic de Barcelona del 2009) o Juan Díaz Canales (en “Fraternity”) y ha desarrollado algunos trabajos notables en solitario (el divertidísimo “Walter el Lobo” con Dib·buks o “Oficio: Dibujante” para Astiberri).
“Los Campbell” es una obra genial. Sin matices. Un conjunto redondo que merece la pena desde su portada hasta su punto final. O hasta su punto y seguido, si queremos ser más precisos, puesto que la historia no se cierra sino que el autor nos despide con un ‘cliffhanger’ de manual.
El dibujo de Munuera es una maravilla, dinámico y expresivo, aunque no debe sorprendernos a quienes lo venimos siguiendo desde hace muchos años. Como la misma editorial Munuera señala, el lorquino Munuera no nos decepciona en este segundo volumen de “Los Campbell” donde además, gracias a Sergio Román ‘Sedyas’ que ya había colaborado con el dibujante en “Sortilegios”, podemos disfrutar de un elegante colorido que aporta dinamismo a la historia y a la evolución de los personajes, y que utiliza con inteligencia el contraste cromático, recurriendo a los tonos sepia en las viñetas en las que se recuerda un momento del pasado de Campbell.
La historia es dulce y triste, con secretos y aventuras, con acción y romance, personajes carismáticos y numerosos secundarios que aportan profundidad a la historia. ¡Cómo las películas de piratas clásicas que nos descubrieron un universo de aventura y acción en la sobremesa de los sábados de los primeros años de la televisión en color. Y es que ¿quién no adora a estos antihéroes románticos? Criminales, delincuentes, saqueadores de los mares, ladrones de tesoros,… pero también aventureros osados, encantadores truhanes, amantes del riesgo y soldados de fortuna al servicio de su Majestad.
La ambientación bebe, como el propio autor desvela en su dedicatoria al principio del álbum (“A Errol Flynn, a Douglas Fairbanks y Burt Lancaster”), a las películas clásicas del género. Y a “Monkey Island”, con su Guybrush Threepwoody el malvado pirata LeChuck, a la obra de Goscinny y Uderzo, e incluso podemos encontrar referencias a “La princesa prometida” y su temible pirata Roberts. Y muchos más que no habremos visto, pero que están.
La publicación en forma de serie es la elección adecuada y a las palabras de Munuera en una entrevista que le hicimos hace algunos años nos remitimos: “El formato de serie, que tan bien se adapta al tebeo, es una gozada: uno puede desarrollar los personajes y los universos libro a libro, enriqueciéndolos poco a poco, y verlos crecer. A mí me gustaría morirme habiendo hecho alguna serie larguísima, de esas de 20 o 30 libros, pero por el momento, por una u otra razón, no he pasado en ninguna de seis”.
En conclusión, un cómic con una historia de corte clásico, servida por un dibujo expresivo, dinámico y un punto ‘cartoon’. Indispensable y muy recomendable.
Los Campbell 2. El temible pirata Morgan
Autor: José Luis Munuera
Título original: Les Campbell 2. Le redoutable pirate Morgan
Formato: 24,5×32,5cm. Cartoné. Color
ISBN: 978-84-15850-68-7
Páginas: 56
Precio: 14 euros
A ver, la de abogados cristianos (me la agarras con la mano) me parece tan estúpido... en fin, además ahora,…