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El León de Oro en el Festival de Venecia, dos Globos de Oro y cuatro Oscar (mejor película, mejor dirección, banda sonora y diseño de producción) de trece nominaciones, entre otros muchos reconocimientos, “La forma del agua” de Guillermo del Toro fue una de las películas más aclamadas del año 2018. La historia que nos contó, la afinidad inesperada entre una joven muda que trabaja como empleada de la limpieza en un laboratorio de alta seguridad y una criatura anfibia que mantienen encerrada en el lugar, recordó a muchos espectadores a “La mujer y el monstruo“, una película de Jack Arnold del año 1954. Y Guillermo del Toro nunca ocultó que era su gran inspiración, de quien tomó prestada a la criatura para desarrollar su propio relato.

Creature from the Black Lagoon“, título original en inglés de la vulgar traducción al castellano “La mujer y el monstruo“, es una película que se suele incluir en la lista de los Monstruos de la Universal. Drácula, Frankenstein, el Hombre Invisible, el Hombre Lobo, la Momia o el Fantasma de la Ópera, criaturas que marcaron la historia del cine de terror en las primeras décadas del medio, producidas por Universal Pictures. El primer universo cinematográfico de la historia, del que el monstruo de la Laguna Negra formaría parte.

Dirigida por Jack Arnold y protagonizada por Richard Carlson, Julie Adams, Richard Denning y Antonio Moreno, el film nos contaba como una expedición científica en busca de fósiles en el río Amazonas es interrumpida por un sorprendente e inesperado hallazgo: el legendario monstruo de la laguna negra. Los exploradores capturan a la criatura con fines científicos, pero la criatura logra escapar de su encierro. Entre el miedo y el caos desatado por el desconocido paradero en el que puede hallarse el monstruo, éste regresa al campamento de la expedición para llevarse a la preciosa Kay, prometida de uno de los investigadores de la expedición, de la cual el hombre-amfibio se ha enamorado.

Hay quien recordará que Marilyn Monroe se lamentaba del destino de la pobre criatura enamorada en la película “La tentación vive arriba“, cuando veía la película durante una calurosa noche de verano junto a su vecino. En general el espectador empatiza con el pobre monstruo, que se ve arrancado de las profundidades de su lago oscuro por unos científicos curiosos y acaba malherido tras su encuentro con los seres humanos, de la misma manera que lo hacía la criatura de Guillermo del Toro en “La forma del agua“. El monstruo es la víctima, como también lo fue el monstruo de Frankenstein o King Kong. Una criatura, por cierto, creada por la artista Milicent Patrick, también actriz, que además fue la primera mujer en ser contratada por Walt Disney Pictures para el departamento de animación.

La película dio lugar a dos secuelas: “Revenge of the creature“, del año 1955, también dirigida por Jack Arnold y “The creature walks among us“, del año 1956, dirigida por John Sherwood. Correctas, pero a años luz de la primera película.

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