Este miércoles, 23 de marzo, sale a la venta la última parte de la trilogía de Takeshi Kovacs, “Furias desatadas“, de Richard Morgan. Tras las dos primeras entregas, “Carbono modificado” y “Ángeles rotos“, Gigamesh nos traerá el cierre del periplo de Takeshi Kovacs, un antiguo soldado de élite del planeta Harlan que había sido juzgado, condenado y almacenado pero que volvió a ser reanimado.

Entre la población del Mundo de Harlan, cansada de los atropellos de las primeras familias, las corporaciones y la yakuza local, se gesta una nueva revolución, alentada por rumores de que la mismísima Quellcrist Falconer ha regresado de la muerte para liderarla. Cuando Takeshi Kovacs vuelve a este escenario como una tormenta digital, tendrá que enfrentarse literalmente a sí mismo y acabará dando rienda suelta a una furia que cambiará para siempre el mundo que conocía.

Hasta el economista más neoliberal confiesa, en la intimidad y con micros apagados, que se han pasado con la dosis de su receta. La sociedad del siglo XXI está sufriendo los efectos de una política global fundamentada en un modelo de desarrollo neoliberal que ha arrasado con todo. El modelo se está agotando, y solamente deja tierra quemada a su paso. Muchos lo habían anticipado, pero a los disidentes y a los críticos se los silenció, se los desacreditó, se los apartó e, incluso en algunos lugares del mundo, directamente se los eliminó. Algunos optaron por expresar su opinión por otros medios, como el escritor Richard Morgan en su novela “Leyes de mercado” o en la trilogía de Takeshi Kovacs.

Gigamesh ha anunciado que esta misma semana sale a la venta “Furias desatadas”, la tercera y última entrega de la trilogía de Takeshi Kovacs escrita por el británico Richard Morgan. La primera entrega de esta saga ciberpunk con la que nos han enseñado a temer el futuro hipertecnológico que nos espera, “Carbono Modificado“, se adaptó a la pequeña pantalla por parte de Netflix con notable éxito. “Furias desatadas“, por su parte, es el inquietante desenlace de la trilogía en la que Richard Morgan se inspira en este neoliberalismo rampante que nos deshumaniza a marchas forzadas en el presente. Y durante ese viaje aterrador expone la única posibilidad que tenemos de enfrentarlo: desatar todas las furias.