Dolmen Editorial nos presenta la quinta entrega de las maravillosas aventuras del sargento Chesterfield y el cabo Blutch en “Casacas Azules” y la verdad es que a la calidad del las tres historias (“Azules y Encaje“, “Los primos de Enfrente” y “Baby Blue“) se suma la de una edición que la complementa y mejora.

Casacas azules (1983-1985)
Edición original: Les tuniques Bleues BEL
Guión: Raoul Cauvin
Dibujo: Willy Lambil
Color: A color
Formato: Libro cartoné, 168 págs. color.
29,95 €

A la cargaaa! Al oír el grito del capitán Stark, Blutch y el sargento Chesterfield saben que es el momento de entrar en acción. Y lo hacen con tres aventuras totalmente inéditas en las que siguen mostrándonos las mil y una facetas de la gran epopeya del Far West. En El “David”, nuestros dos militares deberán desvelar el secreto de un misterioso artefacto submarino que se dedica a atacar los barcos nordistas. Black Face es un alegato antirracista en el que conocerán a un intrépido afroamericano que lucha por los derechos de su pueblo. Y en Cinco del patíbulo, en busca de nuevos efectivos para alimentar sus tropas, se encontrarán con un grupo de sombríos personajes. Los extras incluyen un completo dosier sobre la marina estadounidense en la Guerra de Secesión.

En este volumen podemos disfrutar con tres nuevas historias sobre Casacas Azules y seguir descubriendo que Raoul Cauvin y Willy Lambil no sólo hablan sobre la guerra, sino sobre la propia esencia del ser humano… a la par que el cabo Blutch intenta desertar o salirse con la suya mientras el sargento sargento Chesterfield sigue inmutable en su defensa del ejército y de la guerra. En estas tres historias veremos, primero, en Azules y Encaje cómo la incorporación de enfermeras trastoca al campamento yanqui, y a sus soldados, que desean ser atendidos por las enfermeras. Naturalmente la cosa se complicará mucho más cuando Blutch se comprometa con una de las enfermeras y todo el campamento se vuelque con su boda, aunque Chesterfield sospecha…

Por otra parte tenemos la siguiente historia: Los primos de Enfrente, en este álbum un corte en las vías del ferrocarril llevará a Blutch y Chesterfield a reparar las vías, en compañía de otras tropas, donde el sargento se reencontrará con dos de sus primos… en el ejército confederado, lo que les llevará a sufrir varios altercados con el enemigo mientras los Casacas Azules intentan reparar las vías y la situación se complica cuando los confederados se entregan para ayudar en la reparación de las vías… aunque obviamente tienen planes secretos…

El volumen finaliza con Baby Blue, una antología de seis historias en las que se narra el destino de un bebé encontrado por Chesterfield y Blutch y que no sólo sirve para que sepamos lo amargo que era el destino de los bebés en la guerra, sino también para ver cómo ve el resto del ejército al sargento y al cabo, y cómo muchos les temen, y es que son una pareja temible.

Para finalizar este quinto volumen de Casacas Azules tenemos un par de artículos realmente interesantes que nos ponen en perspectiva la incorporación de las mujeres, enfermeras, al ejército y, en el segundo artículo, el destino de los bebés y niños en la guerra. Además de alguna que otra interesante ilustración, aunque yo valoro especialmente el interés de los dos artículos.

Raoul Cauvin me tiene completamente convencido, y es que después de leer su trabajo en Casacas Azules se puede apreciar cómo se esfuerza por retratar la guerra pero hacerlo de una forma más amable, educativa, a la par que no renuncia al humor ni a la crítica. He disfrutado especialmente con Baby blue, un tierno relato divertídisimo.

Por otra parte me vuelvo a admirar con el trabajo de Willy Lambil, es realmente espectacular y divertido, con una expresividad que ya quisieron muchos para sí, y es que la línea clara no significa renunciar a calidad alguna a la hora de expresar emociones y sentimientos. Es imposible no dejar que los lápices de Lambil nos emocionen, al igual que es imposible reprimir las carcajadas al leer Casacas Azules. Ficción educativa y divertida, ¿qué más se puede pedir?

En cuanto a Dolmen, ya lo he comentado antes, la colección Fuera Borda es una maravilla que no sólo nos está permitiendo recuperar material clásico sino que también nos está permitiendo descubrir nuevo material y para alguien que no conocía mucho de estos títulos es, sin duda, una gozada.

En definitiva, no me canso de leer más y más albums de Casacas Azules y tan sólo me gustaría que Dolmen publicase con más rapidez (como si lo hacen bimestral) con los que poder disfrutar.