He tenido ocasión de visitar la exposición “Cómic. Sueños e historia” en el CaixaForum de Barcelona antes de que baje la persiana, el próximo día 15 de enero. Esta exposición propone un recorrido por algunos de los mejores cómics de la historia y profundiza en el proceso de producción del cómic, desde el boceto y el dibujo hasta la impresión final de la obra. En mi opinión, una muestra indispensable para cualquier aficionado al noveno arte.

Esta exposición se acerca al cómic como herramienta de pensamiento y como medio capaz de intercalar el corte de la discontinuidad en las lógicas de las historias. A lo largo del siglo xx y hasta llegar a la actualidad, el cómic ha constituido un espejo de la realidad capaz de captar los cambios en la sociedad y los modelos de imaginación. Al mismo tiempo, el cómic ha sido también incentivo de esos cambios y ha aportado anticipaciones sustantivas, como muestra la aproximación a la obra de autores como George Herriman, Milton Caniff y Jean Giraud (Moebius) en esta exposición.

La muestra incluye obras de algunos de los personajes o cómics más célebres como The Yellow Kid de Richard Felton Outcault, Little Nemo in Slumberland de Winsor McCay, Terry and the Pirates de Milton Caniff, Tintín de Hergé, Flash Gordon de Alex Raymond, The Spirit de Will Eisner, Sin City de Frank Miller, The Amazing Spider-man de John Romita, Watchmen de Dave Gibbons y Alan Moore, Arzach de Moebius y Corto Maltés de Hugo Pratt, entre otros. Además, estas obras dialogan con una selección de obras de autores nacionales.

Con más de 350 piezas, incluyendo más de trescientos originales, de imprescindibles de la viñeta como Hergé, Moebius, Quino, Mike Mignola, Jack Kirby, Regis Loisel, Richard Felton Outcault, Winsor McCay, Milton Caniff, Hergé, Claire Bretécher, Alex Raymond, Hugo Pratt, Francisco Ibáñez, Purita Campos, Juanjo Guarnido, Albert Uderzo, Alberto Breccia, Enki Bilal, Will Eisner o Robert Crumb, entre muchos otros, esta ambiciosa exposición “Cómic. Sueños e historia“, que ha estado en el CaixaForum de Barcelona desde el 29 de septiembre, recorre momentos clave de la historia del noveno arte, desde sus inicios hasta la actualidad, con especial atención a la evolución del cómic europeo. Destacados autores españoles han colaborado en el proyecto creando ilustraciones para la muestra. Es el caso de Paco Roca, María Medem y Ana Galvañ, responsable del cartel de la exposición.

La exposición se nutre de la rica colección de Bernard Mahé, galerista, coleccionista y comisario de la exposición con el equipo de 9e Art Références, que es una de las más importantes de Europa, y se ha completado con préstamos de numerosas instituciones y de coleccionistas privados, así como de los propios autores, en el caso del cómic español. La muestra se completa con primeras ediciones de revistas y libros, y también con reproducciones digitales.

Distribuida en ocho ámbitos, “Cómic. Sueños e historia” sigue el cómic desde sus inicios de este género, su eclosión con los medios de impresión masivos y la edad de oro del cómic estadounidense (del crac del 29 a la Segunda Guerra Mundial), el nacimiento y mito de los superhéroes, la edad de oro del cómic francobelga, la llegada de la modernidad en torno al eje Italia-Argentina, la explosión del género fantástico, la llegada de la novela gráfica, los nuevos formatos de publicación y la nueva vanguardia surgida en las últimas décadas. Todo ello, prestando una especial atención a la evolución del cómic en España, sección para la que se han escogido obras de una selección de autores de las últimas décadas, entre los que figuran Marta Altieri, Javier Olivares, Keko, María Medem, Ana Galvañ, Marta Cartu, Luis Durán, Santiago Sequeiros, Ana Penyas, Marcos Prió, Kim, Laura Pérez Vernetti, Pablo Auladell o Paco Roca.

La exposición en el CaixaForum de Barcelona finalizará el próximo domingo, 15 de enero, de manera que os apremio a todos aquellos que aún no os habéis acercado al flamante edificio de la Av. de Francesc Ferrer i Guàrdia, 6-8, al pié de la montaña de Montjuïc. La exposición lo merece, de verdad.