Nunca serán suficientes los agradecimientos a Vic por ponerme sobre la pista de esta saga. Él fue la primera persona que me habló de ella y de él me acordé cuando disfruté con esta novela, una de las mejores que he leído nunca. Como siempre con las novelas yo os recomendaría que la leyérais antes de ver la serie de HBO. En cualquier caso hay que disfrutar ambas cosas porque merece muchísimo la pena.

Ficha técnica:
Título original: “A Storm of Swords”
Saga: Canción de hielo y fuego/3
Gigamesh Bolsillo, núm. 7 (En tres tomos)
Colección dirigida por Alejo Cuervo
Traducción de Cristina Macía
Prólogo de Alberto Cairo
Ilustraciones de portadas de Corominas
ISBN 978–84–96208–76–6
432+432+432 págs. (3 vols.)
P.V.P. 21,00 €
COMENTARIOS EDITORIALES

Las huestes de los fugaces reyes de Poniente, descompuestas en hordas, asuelan y esquilman una tierra castigada por la guerra e indefensa ante un invierno que se anuncia inusitadamente crudo. Las alianzas nacen y se desvanecen como volutas de humo bajo el viento helado del Norte. Ajena a las intrigas palaciegas, e ignorante del auténtico peligro en ciernes, la Guardia de la Noche se ve desbordada por los salvajes. Y al otro lado del mundo, Daenerys Targaryen intenta reclutar en las Ciudades Libres un ejército con el que desembarcar en su tierra.

Martin hace que lo imposible parezca sencillo. Tormenta de espadas confirma Canción de hielo y fuego como un hito de la fantasía épica. Brutal y poética, conmovedora y cruel, la magia de Martin, como la del mundo de Poniente, necesita apenas una pincelada para cautivar al lector, hacerlo reír y llorar, y conseguir que el asombro ceda paso a la más profunda admiración por la serie.

«George R.R. Martin sigue elevando la fantasía épica a nuevos niveles de ingenio y elaboración.
Locus
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Cuando los cascos retumban y las espadas cantan, no hay refugio ante la tormenta.

La batalla del Aguasnegras ha inclinado por el momento la balanza en la guerra de los Cinco Reyes en favor de Joffrey Baratheon y de la corte liderada por su abuelo Tywin Lannister…, aunque no todos los miembros de la familia disfrutan de sus privilegios. Robb Stark, Rey en el Norte y su principal adversario, se ha establecido en Aguasdulces, donde sus consejeros le hacen ver que, a pesar de haber ganado todas las batallas, quizá esté perdiendo la guerra. Mientras, en el Muro, la Guardia de la Noche se sacrifica para defender el mundo conocido, pero Jon Nieve sospecha que, realmente, ninguno de sus miembros sabe nada; Stannis Baratheon parece guardar secretos que van más allá de la lógica, y Daenerys Targaryen anhela el momento de volver a su tierra.

En Tormenta de espadas, tercera entrega de Canción de hielo y fuego, George R.R. Martin imprime un ritmo trepidante a los acontecimientos que se ciernen de forma implacable sobre sus personajes. Los giros argumentales, golpes de efecto y los recursos del mejor folletín no hacen sino subrayar la mirada lúcida, refractada en el caleidoscopio de una galería de personajes inolvidable, de un narrador para quien los claroscuros del alma humana no parecen guardar secretos. Una obra vasta y ambiciosa, y una auténtica delicia para el lector exigente.

La novela que perdió el premio Hugo ante Harry Potter y el cáliz de fuego.

La primera entrega de la saga (“Juego de tronos”) es una presentación apasionante que te hace devorar páginas queriendo saber más y más, la segunda parte (“Choque de reyes”) consigue desarrollar en paralelo varias historias y bifurcar tu atención en varios puntos de interés haciéndolos avanzar con más de una sorpresa hacia un rumbo incierto. Esta tercera parte retoma los hilos argumentales de la anterior, los desarrolla, enriquece nuestra visión de los personajes y además proporciona algunos momentos más espectaculares que jamás he leído en una novela de ficción, lógicos teniendo en cuenta los acontecimientos que se suceden pero no por ello menos impactantes.

Reconozco que el primer tramo de esta larguísima tercera novela (divida en tres tomos en la edición de bolsillo de Gigamesh) lo leí impulsado por el interés que me despertaban las subtramas de la segunda novela, pero es que el tramo final es, gracias a los giros inesperados que urde Martin, de una fuerza narrativa tal que resulta imposible parar de leer. No quiero ahondar en esa cuestión por no elevar en exceso las expectativas de quien quiera leer la obra, pero sí puedo decir que pocos títulos me han obsesionado tanto y me han empujado de esa forma a seguir leyendo. Creo que consumí las últimas trescientas páginas en apenas horas con permanente expresión de sorpresa y sin parar de emocionarme ante lo que iba ocurriendo.

Yo diría que “Tormenta de espadas” es la mejor de las tres primeras novelas de la saga. Martin manifiesta en ella toda su maestría no sólo para desarrollar personajes sino también para noquear al lector con lo que les va sucediendo y todo sin renunciar a una lógica interna sin la que no valoraríamos tanto la historia. Podríamos decir que lo que sucede página a página es el resultado normal teniendo en cuenta todo lo que ha venido sucediendo antes, pero aún así los hechos narrados se nos echan encima con la fuerza de un tsunami como sucede muchas veces en la realidad.

La capacidad que manifiesta George R. R.Martin para sorprender está ligada al hecho de que todo puede ocurrir en las páginas de sus novelas lo cual es una virtud muy valorada por el lector de ficción. La historia de “Canción de fuego y hielo” es todo menos previsible y esta tercera parte es una buena prueba de ello. No concibo posible no quedarse boquiabierto con episodios como el de la Boda Roja o los que cierran la novela por lo que el disfrute está prácticamente asegurado.
Yo diría que su lectora es ABSOLUTAMENTE RECOMENDABLE, no os arrepentiréis y lo digo sin temor alguno a equivocarme.