Un trocito de libro para cada día, para que lo tengas cerquita todo el invierno y si quieres saborearlo más, puedes darle todas las vueltas que quieras también está permitido. “Un poema para cada día de invierno” es un libro que no tiene edad ni tiempo, nos sirve para todas las personas y para todos los tiempos ya que dentro hay poemas de ayer y de hoy.


Un poema para cada día de invierno

Un poema para cada día de InviernoAutoras: Vanesa Pérez-Sauquillo Muñoz, Raquel Díaz Reguera
Sello: BEASCOA
Precio con IVA: 16.95€
Fecha publicación: 11/2019
Formato, páginas: Tapa dura, 64
Medidas: 226 X 287 mm
ISBN: 9788448854164
EAN: 9788448854164
Temáticas: Infantil
Colección: Poemas Infantiles
Edad recomendada: A partir de 4 años

El invierno abre las puertas de su madriguera, ¿y qué mejor que la poesía y la música para llenar sus días de color y sus largas noches de luz?

Para acompañaros cada día, os ofrecemos esta selección de poemas populares en castellano y en otros idiomas, junto con textos de grandes autores. Y entre todos ellos, personajes nuevos e inolvidables creados por la poeta Vanesa Peréz-Sauquillo e ilustrados por Raquel Díaz Reguera.

“He descubierto muchas coas pensando en las musarañas y hablando con ellas. Ya sé qué pasa con los bichos cuando hace frío, por qué está resfriado el monstruo del lago Ness, qué busca el viento, cómo dormir a una momia y quién fue el primero en llegar al Polo Norte en bata.

Como veis, son cosas fundamentales. Dejad que os las cuente desde el primer día

Cuando vi que del libro una de las autoras, bueno la ilustradora era Raquel Díaz Reguera, no loé en tenerlo para mí por varias razones: la sigo desde hace tiempo y me gustan un montón sus libros y sus ilustraciones que las diferencias entre otras ilustraciones por su uso de la pintura acrílica y su trazo con personajes muy característicos como por ejemplo con la cabeza más grande que el cuerpo y por ultimo porque cuando cayó en mis manos su cuento “Cuando las niñas vuelas alto” una de las protagonistas tenía mi nombre (era la primera vez que lo veía en un cuento) y fue un plus en hacerme seguidora de Raquel.

También me gusta la idea del libro un poema para cada día de invierno, pensaba que era una idea original ya que creo que se aleja de la línea de adviento y podía servir para pasar un ratito agradable todos los días en el sofá debajo de una manta.
Pues todas estas grandes expectativas tenía antes de abrir el libro así que me dispongo a hojear (siempre antes de leerlo suelo pasar casi todas las páginas para hacerme una idea) y se sorprende que a primera vista hay muchos temas con el fondo de la Navidad y todo lo que conlleva su tradición por lo que me decepciona un poco, lo justo para no volver a echar un vistazo durante un tiempo.

Un poema para cada día de InviernoCuando ya me dispongo a realizar un análisis del libro y a empezar a leerlo con detenimiento veo que pasadas las fechas del periodo de Navidad vuelve a aparecer una sonrisa en mi cara y empiezo a disfrutar del libro como se merece.
Es un conjunto de poemas, canciones, adivinanzas, refranes que no son sólo en castellano (hay en otros idiomas) sino también hay poemas que no suelen estar escritos en ningún sitio ya que se han ido transmitiendo de boca a boca a través de canciones y juegos que se van alternando con poemas, adivinanzas,… de la misma autora.

La autora, Vanesa Peréz-Sauquillo (como me encanta que las autoras e ilustradoras sean mujeres) además de ser poeta es autora de literatura infantil y juvenil y traductora, que además hace recitales de su poesía de una forma muy especial y original acompañada por la guitarra clásica y de jazz de Paul Gladis.

Este libro me ha enseñado que no las primeras apariencias son las correctas y además me ha puesto delante a su autora, Vanesa, que he descubierto que tiene numerosos libros tanto de poemas como de literatura infantil y juvenil, obteniendo varios premios, por lo que he descubierto una nueva autora que empezaré a seguir sus pasos o mejor dicho sus letras.

Me ha descubierto nuevos poemas y otros que me ha devuelto de mi infancia, unos que me sabía por lo que casi no he tenido que leerlos y otros que he leído varias veces para apreciarlos y saborearlos, dejándome un gusto bueno y surgiendo el efecto que quería que tuviese en mi este libro. ¡E incluso he hecho notas mentales para aprenderme algún poema!

Así que por fin lo he conseguido, pretendía pasar un buen rato en el sofá debajo de la manta, teniendo un ratito para mí y levantarme con una sonrisa. Pero eso sí, imposible solo leer el texto que me pertenece por día, empiezo en el día y como me deja con ganas de más sigo un ratito más con el libro.