Este fin de semana se estrena en España Hancock, la última película de un Will Smith que regresa a un género perfecto para él, que combina la acción con toques de comedia.
Título original: Hancock
Año: 2008
Duración: 92 min.
País: Estados Unidos
Director: Peter Berg
Guionistas: Vince Gilligan, Vincent Ngo
Reparto: Will Smith, Charlize Theron y Jason Bateman
Productores: Ian Bryce, Akiva Goldsman yJames Lassiter
Distribuidor: Sony / Columbia
Antes de entrar a hacer un breve análisis de la película os aviso; tiene trampa, Hancock no es lo que te esperas.
Hace unos meses comenzamos a oir hablar con fuerza de Hancock, una película en la que veríamos a Will Smith interpretando a un superhéroe que ha tocado fondo. De hecho Hancock prácticamente vive en la indigencia y tan sólo se preocupa por dos cosas: el alcohol e intentar hacer el bien. Pero Hancock es un tanto descuidado, acude a las misiones borracho y no se preocupa en exceso por los daños colaterales con lo que la ciudad de Los Ángeles, y la propia policía, alcalde, gobernador, etc, no sienten demasiada simpatía por él. A pesar de lo cual intenta seguir cumpliendo con su deber.
Todo esto cambiará cuando Ray Embrey, Jason Bateman, un relaciones públicas que intenta hacer el mundo un algo mejor, sea rescatado por Hancock de una muerte segura. A partir de ese momento fijará como objetivo de su vida el hacer que Hancock sea querido y adorado por todo el mundo… por lo que le recomendará ir a la cárcel por todos los daños causados como primer paso para recuperar la confianza de los ciudadanos y de las fuerzas de la ley.
El otro eje argumental de la película lo tenemos entre Hancock y la hermosa esposa de Ray, Mary Embrey, Charlize Theron, y es que parece que hay alguna chispa en el ambiente… Aunque en este aspecto de la película no quiere detenerme ahora.
No quiero contaros nada más, no me parece bien destriparos una película que, personalmente, he encontrado más que interesante.
Hancock está dirigida por Peter Berg, quien parece ha dado el salto definitivo de la TV al cine. No es que haya demasiados alardes en la película (¿dónde habrán ido a parar los 150 millones de dólares que ha costado?) pero está muy bien manufacturada y algunas escenas (como la del asalto al banco) están muy bien rodadas y montadas.
En cuanto a la historia en sí… bueno, posiblemente, junto a Will Smith y Jason Bateman, sea de lo que más me ha gustado. Hay varios giros y requiebros argumentales muy bien llevados, de hecho la película te sorprende en un par de ocasiones, especialmente por la carga dramática de estos momentos. Por lo que creo que es justo decir que está bien escrita y que hay muchísimas más luces que sombras.
Hablando en líneas generales tengo que decir que la historia no parece que de más de sí, aunque queda la posibilidad clara de una segunda parte a pesar del final “cerrado” de la película, pero Vincent Ngo y Vince Gilligan, los guionistas, se lo han sabido montar para exprimir al máximo el argumento de un superhéroe que, a pesar de estar en su peor momento, intenta hacer el bien… aunque con resultados algo insatisfactorios.
Es una película divertida y que te sabe atrapar, no es que haya que pedirle mucho más de lo que nos da, pero el que cuente con sorpresas no destripadas por los traileres ya es como para darse con un canto en los dientes habida cuenta de la manía que se tiene últimamente de destripar las películas enteras en los trailers.
Poco más me queda por decir de Hancock, una película que se basa en un triángulo de grandes actores que, si bien no hacen una gran película, sí hacen un más que meritorio trabajo con un resultado francamente bueno. Hancock mola.
¡¡QUIERO MÁS!!