He tardado “un poco” pero por fin he podido leerme “Kingsman. The Secret Service“, un comic de Mark Millar y Dave Gibbons que Matthew Vaughn‎ convirtió en una película fantástica. Y no es de extrañar, puesto que el cómic ya lo es.

Kingsman. The Secret ServiceKingsman. The Secret Service
Edición original: Kingsman. The Secret Service USA
Guión: Mark Millar
Dibujo: Dave Gibbons
Color: A color
Formato: Libro cartoné, 168 págs. a color
18 €

¡El guionista de Kick-Ass, Superior, Nemesis y Civil War! ¡El dibujante de Watchmen! ¡Llega la colaboración que estabas deseando contemplar! El mayor agente secreto del mundo está sumergido en el más importante caso de su carrera. Pero el fin del mundo tal y como lo conocemos tendrá que pasar a un segundo plano, porque ahora tiene que enseñar a su sobrino a convertirse en el siguiente James Bond. Bajo la supervisión de tío Jack, las habilidades de Gary comenzarán a crecer… Hasta que ambos se vean envueltos en una serie de secuestros de famosos. ¡Ni te imaginas quiénes están detrás!

Acabo de darme cuenta de que, inexplicablemente, aún no hemos publicado una reseña de la excelente película de Matthew Vaughn‎ que adapta este cómic de Mark Millar y Dave Gibbons, es algo imperdonable por lo que prometo que alguna de las próximas veces que vuelva a ver Kingsman: servicio secreto haré una reseña que sirva de loa a la excelente película de espías que nos brindó la locura conjunta de Vaughn y Millar, de momento vamos a centrarnos en el cómic, aunque haré alguna referencia a la película, es inevitable.
Antes de nada hay que comentar que es muy curioso comprobar que la pareja de baile esté formada por Mark Millar, uno de los mayores talentos creativos de los últimos tiempos, y Dave Gibbons, un grandísimo narrador y dibujante que firmó, junto a Áquel Que No Debe Ser Nombrado, Watchmen. No acababa de ver yo a Gibbons trabajando con Millar, pero el resultado me ha parecido muuuy recomendable.

Kingsman. The Secret Service

Para empezar a comentar Kingsman. The Secret Service hay que decir una cosa: cunde, cunde muchísimo. Sí, es cierto que la película va un pelín más al grano, y aunque con una historia condensada en 129 minutos se nota que había mucha más historia que contar, ¿dónde está?

Pues en este cómic, en este cómic es dónde vemos lo que Vaughn nos hurtó de la primera película y es que ver este opening con Mark Hamill es, absolutamente, hilarante y una muestra de por dónde nos llevará el cómic a lo largo de los 6 tebeos que lo componen. Una especie de advertencia de Millar y de Gibbons de que aquí rigen las reglas de James Bond, pero con el sentido del humor propio de Millar. Por suerte cuenta con un narrador tan bueno como Gibbons que logra que en Kingsman. The Secret Service ocurran cosas, muchísimas cosas.

Kingsman. The Secret Service

La historia de Kingsman. The Secret Service sigue los mismos pasos que en la película, pero se detiene en momentos específicos que la película o bien reserva para el final o no refleja. Uno de los aspectos más destacables es que el tío Jack sí está vivo a lo largo de la película y cumple con el papel de instructor que permitirá a Gary salir de una vida que lo arrastraba al pozo. Eso sí, pronto sabemos del villano y de su plan que tiene un estreno mucho más interesante que el de la película, cuando logra que 51 parejas de recién casados se asesinen entre sí en… minutos.

Kingsman. The Secret ServiceUn detallito que me encanta es que no paren de hablar de los recortes que el Gobierno ha realizado y que tienen tocado al departamento, je, me hace sentir más cercano al protagonista.

En cuanto a la historia en sí habría que decir que Millar lo hace mejor con el guión de la película, aquí se detiene más en Gary y en Jack, descuidando a algún otro personaje que se merecería un poco más de espacio, así como espacio para la trama principal, en el que se omite, en gran parte, un punto fundamental de la trama de la película y que constituye el eje del plan maestro del villano. En la película se solucionan estos errores, aunque eso nos cueste perder otras grandes escenas que sí podemos ver en el cómic.

Por otro lado tenemos a un veterano Dave Gibbons que quizás nos presente un trabajo un tanto rígido en ocasiones y que no se vence al gore que habitualmente nos ofrecen los trabajos de Millar, pero que no os engañen estas palabras, en Kingsman. The Secret Service Gibbons vuelve a demostrar que es un profesional como la copa de un pino y capaz de mostrarnos, a la perfección, las reacciones de sus personajes sin descuidar el resto del cómic y ofreciendo algo casi inaudito en la industria: ¡fondos bien hechos! Pocos autores hubiesen podido ofrecer un resultado tan bueno y ser capaces de ofrecer un trabajo tan bueno y detallado.

En definitiva, puede que nunca sea capaz de decidirme entre la película y el cómic de Kingsman. The Secret Service, lo que sí sé es que ambos se complementan casi a la perfección y que el trabajo de Mark Millar y Dave Gibbons pide a gritos una segunda entrega.