Continuamos con la lujosa edición de la etapa de Geoff Johns a cargo de los “Jóvenes Titanes“. En este segundo volumen tenemos muchísima acción, descubrimientos sorprendentes, cross-over con los Outsiders y traiciones. Adrenalina en estado puro.
Jóvenes Titanes de Geoff Johns nº 02
Guión: Geoff Johns
Dibujo: Mike McKone, Tom Grummett, Tony Daniel
Edición original: Teen Titans # 13-26, 29, Teen Titans Legion Special 01, Outsiders # 24-25 USA
Libro cartoné, 368 págs. a color.
25 €
Los Jóvenes Titanes emprenden un periplo por el tiempo que les llevará a la época de la Legión de Superhéroes y a otra más cercana donde conocerán lo que les puede deparar el futuro… aunque no les guste en absoluto. Y lo que les espera en el presente no será mucho más halagüeño, ya que también deberán hacer frente a la furia del Doctor Luz y al destino de Superboy en este segundo volumen de la etapa escrita por Geoff Johns y dibujada por Mike McKone y otros artistas como Ivan Reis o Tom Grummett.
Hay que saber reconocer que este volumen es, como mínimo, tan interesante, sino más, que el anterior. En estas más de 350 páginas a Geoff Johns le dio tiempo a enviar a los Jóvenes Titanes al futuro de la Legión de Superhéroes para lugar contra los Cinco Fatales… y otras cien versiones de distintos universos. Con lo que se daba pie al relanzamiento de los héroes del futuro… y a ciertos cambios en Superboy. Cambios que se potenciarían en el “regreso” al pasado de nuestros Jóvenes Titanes, aunque el pasado que alcanzan sigue siendo su futuro donde se encuentran con oscuras versiones de ellos mismos que han partido en dos el país. Robin, Wonder Wirl, Superboy… han ocupado, a la fuerza, el puesto de sus “maestros” y ahora existen dos grupos de Titanes, uno liderado por Ciborg que se opone al liderado por Robin/Batman y que pretende liberar al resto de los USA… Este futuro tan oscuro tan sólo reafirma a los héroes en su misión y evita su separación. Eso sí, tenemos un pequeño respiro con la llegada de la nueva Speedy al grupo, el conocimiento de que el padre de Tim ha sido asesinado (lo que une más al grupo) y vuelta a la acción con la llegada de un Doctor Luz deseoso de venganza tras descubrir lo que los héroes de la JLA le habían hecho en la miniserie Crisis de Identidad. Tras este varapalo, que nuevamente refuerza la imagen que Johns quiere dar a los Jóvenes Titanes (son, primero de todo, amigos, familia) frente a la JLA, le llega el turno al cross-over que ha venido fraguándose desde el comienzo de la serie; una impactante historia que parece capaz de destruir a los Jóvenes Titanes, a pesar de que todos los acontecimientos anteriores no lo habían conseguido…
Y eso que después regresa el Hermano Sangre…
En definitiva, en este segundo volumen nos encontramos con algunas de las mejores historias de estos números, no es de extrañar, ya que Johns se ha ido haciendo más y más con los personajes, ha hecho de ellos lo que ha querido, ha cimentado la colección y al grupo e, inevitablemente, les ha dota de mayor personalidad, cohesión y lazos comunes… en definitiva, ha resucitado a los Titanes con maestría.
Desgraciadamente, y tras la marcha de Mike Mckone de la serie (que es quien le aportó el aspecto gráfico que los define a todos), y tras un decente paso de Tom Grummett, Tony Daniel posó sus manazas de ¿dibujante hot? (qué mal está el mundo para que sea tan apreciado) sobre la serie y la calidad gráfica desciende bastante. Por suerte las historias lo compensan sobradamente, pero duele ver torturar así la serie.
La edición de Planeta de Agostini, a pesar de contar con todos los números en formato grapa, la verdad es que es tan buena que compensa, sobradamente, la adquisición de un volumen que, personalmente, encuentro que tiene muy buen precio. De hecho mis grapas ya tiene un nuevo propietario, así de satisfecho estoy de este volumen.
Para mi este es uno de esos cómics imprescindibles, de puro divertimiento, pero que demuestran lo difícil, y sencillo, que es crear buenas historias.
La pena es que no salió el tercer libro.
Pues sí, es una verdadera lástima porque con un sólo volumen más podrían haber acabado con la etapa de Johns… la pena es que ECC no parece dispuesta a continuarla…