Meses después de la publicación del primer volumen de “Hotwire: Requiem por los muertosDolmen Editorial nos ofrece el segundo arco argumental de Alice Hotwire, un personaje que cada día me parece más interesante, inmerso en un universo CiFi muy sugerente donde los fantasmas están a la luz del día.

Hotwire: Corte Profundo.
Guión: Warren Ellis. 
Dibujo: Steve Pugh
Integral. 20 euros. 144 páginas.
ISBN: 978-84-15201-77-9

Educada y aislada del mundo por una comunidad de científicos, hackers y alternativos, Alice Hotwire nunca es más feliz que cuando da una respuesta sincera a la pregunta: “¿Te crees mejor que yo, o qué?”

Exorcista para la policía metropolitana era la carrera perfecta para alguien que no creía en fantasmas. Le irritaba que las luces azules parecieran desafiar las leyes de la naturaleza, pero le ponía de los nervios que “la mayoría de la gente”, los que leen horóscopos y evitan los gatos negros, usaran su existencia para regodearse con que la ciencia no pudiera explicarlo todo.

Su pelo está decolorado hasta casi reflejar como un espejo, pero estamos seguros de que nació pelirroja. Maniática y autodestructiva, implacable e incorruptible, ella es la única barrera entre nosotros y lo extraño.

Hotwire es un personaje co-creado entre Warren Ellis y Steve Pugh, aunque es este último el que lleva las riendas del personaje y se encarga de continuar sus aventuras dentro de Radical Comics. En esta ocasión nos narra el regreso de Alice a su trabajo como exorcista tras seis meses en el dique seco por los sucesos narrada Hotwire: Requiem por los muertos (http://www.via-news.es/index.php/resenas-comic/5817-hotwire-requiem-por-los-muertos-steve-pugh-a-warren-ellis-dolmen-editorial) cuando Alice salvó a la ciudad. Pero durante su “etapa de recuperación” las cosas han cambiado en la ciudad, y una compañía de seguridad privada, Bear Claw, se entromete en los asuntos de la policía metropolitana en medio de una crisis realmente importante y, además, han colocado a Alice en su punto de mira.

Argumentalmente Corte Profundo es pura adrenalina con un trasfondo muy interesante en el que la CiFi convive con los fantasmas (por mucho que Alice se resista a llamarlos así) y la lucha contra ellos se realiza a través de la tecnología (de la que Alice es devota seguidora). Aún así, en este volumen, podemos apreciar como Pugh intenta dar más consistencia al personaje y darle un mayor trasfondo (como cuando nos habla del pasado de Alice, o como vemos en la minihistoria del final), lo que siempre es de agradecer.

Desde luego, si por algo destacan los cómics de Radical! es por el excelente acabado de éstos a nivel gráfico, Steve Pugh realiza un gran trabajo, pero es el color digital el que, creo, aporta ese aspecto tan sensacional que llama tanto la atención, pero hay que reconocer que sino fuese por el buen dibujo de Pugh el acabado final no sería tan bueno.

Sobre la edición de Dolmen no podemos decir nada más que lo habitual, es un lujo, desde la portada, el papel, rotulación… baste con decir que está al nivel del trabajo de Pugh.

Si estáis buscando una buena historia de ci-fi y un derroche visual, no tenéis que seguir buscando: Hotwire es la elección perfecta.