Todos los grandes autores de cómic deberían salir alguna vez de su zona de confort y atreverse a surcar aguas desconocidas. Este reto serviría tanto para poner a prueba sus habilidades como para dar una satisfacción a sus lectores, quienes son más abiertos y modernos de lo que los editores suelen pensar. La incursión de Enrico Marini en el universo del Hombre Murciélago es un perfecto ejemplo de ello.
¿Qué conexión comparten Batman y el Joker con una misteriosa joven? Tras ser secuestrada por el Príncipe Payaso del Crimen, Batman debe sumergirse en los peores lugares de Gotham, en una desesperada carrera contra el tiempo. Este no es un caso cualquiera; ¡para el Caballero Oscuro, es una cruzada personal!
El suizo Enrico Marini, aclamado maestro del cómic responsable de joyas del BD como “Gipsy” con Thierry Smolderen, el thriller policiaco con grandes dosis de terror gótico y acción “Rapaces” con Jean Dufaux, “Las Águilas de Roma” con la que Marini debutó como autor completo, el western “La Estrella del Desierto” y la prolífica saga de “El Escorpión“, un universo repleto de conspiraciones y tesoros ocultos con grandes dosis de acción, ambos con guión de Stephen Desberg, debuta en el cómic EEUU y en el cómic de superhéroes con “Batman: El Príncipe Oscuro“, una novela gráfica dividida en dos entregas que publica en castellano ECC Ediciones.
Es necesario aplaudir el atrevimiento de Marini, pues pocos autores se han atrevido a dejar su terreno habitual de juego para atreverse a entrar en géneros distintos para mercados y lectores diferentes, desarrollando proyectos para editoriales que no son las que suelen apostar por autores europeos de BD, y dejando el mainstream europeo para probar en el mainstream norteamericano, de la capa y espada a los superhéroes, de las creaciones propias a los personajes con uun largo historial a sus espaldas. Y no cualquier personaje: Enrico Marini se atreve con Batman, ni más ni menos.
Batman… Casi ochenta años de historia de un personaje creado por Bill Finger y Bob Kane en 1939, para la revista “Detective Comics” de la editorial National Publications, que ha contado con versiones de escritores y dibujantes de la talla de Frank Miller, Jeph Loeb, Tim Sale, Ed Brubaker, Neal Adams, Dennis O’Neil, Neil Gaiman, Peter Milligan, Doug Moench, Mark Wolfman, Alan Moore, Brian Bolland, Norman Breyfogle, David Mazzucchelli, Alan Davis, Brian Azzarello, Jim Starlin, Bernie Wrightson, Jim Lee, Paul Dini, Bruce Timm,… ¿Quién se atreve a meterse en este jardín? Sí, Moebius y Milo Manara, ahí es nada, pero también, ¿quién no querría ver su nombre junto al de todos estos maestros del noveno arte?
Como dice el mismo Marini en el prólogo, “a Batman no se le dice que no“.
“Batman: El príncipe oscuro” está contada con agilidad y ritmo, y cuenta con suficientes apariciones estelares como para cubrir las expectativas de la mayoría de aficionados a los cómics del Hombre Murciélago: Catwoman (y Selina Kyle), Alfred, el comisario Jim Gordon, Harley Quinn, y un original Killer Croc, tatuado, con perforaciones e implantes al estilo de Erik, ‘El Hombre Lagarto’ Sprague, que hacen del villano un hombre de cuerpo manipulado y no un monstruo. Y también hay ‘noir’, un Batman detective, bajos fondos y violencia. La misma sopa de siempre pero servida en un plato diferente. Ya lo decía el mismísimo Jim Lee: “Marini nos deja impresionados con un relato clásico e intemporal de Batman que, al mismo tiempo, resulta innovador, atrevido y brillantemente nuevo“.
El trabajo de Enrico Marini en “Batman: El príncipe oscuro” destaca, por encima de todo, por la espectacularidad de sus ilustraciones y el color exquisito, cosa que no debería sorprender a nadie que siga habitualmente los trabajos de este autor suizo. La splash-page con la primera aparición de Batman contemplando la ciudad de Gotham desde una azotea es una obra maestra. Y el guión, simplemente, funciona. La historia no es complicada, pero es original y funciona: Batman investiga el secuestro de una niña que podría ser la hija de Bruce Wayne. El responsable, el Joker. “Mi peor enemigo. Mi opuesto“.
La relación de Batman y el Joker quizá sea la más conocida y tratada entre némesis de la cultura popular reciente. En los cómics han tenido incontables enfrentamientos con “La Broma Asesina” de Alan Moore y Brian Bolland y “Arkham Asylum: A Serious House on Serious Earth” de Grant Morrison y Dave McKean como algunos de los más recomendados y recordados, aunque sus encuentros son incontables, y muchos son sobresalientes. Todos encuentros de Batman con este villano tan despreciable, astuto y descabellado va más allá de la lucha físca, y su combate tiene mucho de psicológico. Tanto Tim Burton como Christopher Nolan aportaron su particular visión del choque entre los personajes con las memorables interpretaciones de Jack Nicholson y Heath Ledger. Con tantos guionistas de diferentes medios aportando su granito de arena a la eterna batalla del Caballero Oscuro contra el Principe Payaso del Crimen, puede resultar difícil contar algo novedoso con los personajes, y Enrico Marini no lo consigue, pero es fiel a ambos iconos y los retrata con fidelidad. No reinventa, pero acierta con lo que propone.
El Joker, el hombre de la risa perpétua, es un sádico, un asesino y un terrorista, despreciable y astuto. En resumen, un demente. Su obra criminal, retorcidos planes cargados de sentido del humor macabro, negro, prosaico y sumamente cruel, tienen siempre un toque de genialidad pero también incorporan la inevitable semilla del fracaso, de la recurrente derrota ante el Hombre Murciélago. Sus enfrentamientos se saldan siempre con la victoria del héroe enmascarado y el regreso del villano a las celdas de Arkham y el guión pocas veces se sale de la senda determinada. Pocas veces, pero no siempre. ¿Que nos deparará la segunda entrega de “Batman: El príncipe oscuro“?
Batman: El príncipe oscuro #1
Autor: Enrico Marini
Edición original: “Batman: The Dark Prince Charming. Book One”
Fecha de publicación: Abril de 2018
ISBN: 978-84-17401-05-4
Formato: Cartoné. Color.
Páginas: 64
Precio: 12,95 €
Curioso porque justo ahora ando enganchado a la trilogía de los Arquitectos... y en cuanto acabe con ella iré a…