¡Qué ganas tenía de volver a visitar Astro City! Y cómo se me olvida lo muchísimo que me gusta ir allí de visita… hasta que abro un tomo y disfruto con el trabajo de Kurt Busiek que, en este Victoria, le da sopas con honda a la mayoría de guionistas del mercado actual. ¡Y sin despeinarse!.

Astro City 2: Victoria
Edición original: Astro City núms. 7 a 12 USA
Guión: Kurt Busiek
Dibujo: Brent Anderson, Graham Nolan, Alex Ross
Color: Alex Sinclair
Formato: Libro cartoné, 160 págs. color.
16,95€

Inspirándose en los diseños del artista Alex Ross, el guionista Kurt Busiek y el dibujante Brent Anderson continúan revolucionando los cómics de superhéroes con su mezcla de épica y cotidianidad. Contempla la hora más baja de Justicia Alada, defensora de las mujeres oprimidas. Vive un día en compañía de la Erudita de Plata, Hechicera Suprema del planeta Tierra. Y descubre el origende del ladrón de guante blanco conocido como el Bandido Caballeroso.

Este segundo volumen de Astro City recopila los números del 7 al 12 del relanzamiento de la colección premiada con los mayores galardones de la industria del cómic.

Han pasado dos años desde que se anunciase que el sello Vertigo acogería una nueva serie regular de Astro City, la serie de superhéroes hecha por Kurt Busiek y Brent Anderson y que cuenta con las portadas de Alex Ross. A lo largo de los años 90 (la serie nació en 1995) se convirtió en algo así como la gran esperanza blanca, y es que compartía hogar con decenas de series de Image Cómics (aunque se publicó dentro del sello Homage, posiblemente lo mejor que ha hecho Jim Lee en su carrera, crear ese sello… bueno, y venderles la moto a DC para que le comprasen la editorial, ¡menudo genio!) donde destacaba con una luz propia que reclamaba el amor hacia el género sin recurrir a la hiper violencia o a mujeres despampanantes vestidas con trajes que necesitaban menos tela que un bikini. Astro City era algo distinto, era una carta de amor al género, y aunque la serie no gozó de la periodicidad o la calidad homogénea que nos hubiese gustado, no cabe duda de que cada número era un soplo de aire fresco en una atmósfera tan viciada. Astro City fue una serie multipremiada, de hecho contar el número de Premios Eisner (doce) y de Harvey (nueve) me ha llevado un buen rato, y es que aunque es Kurt Busiek el que cosecha la mayor parte de los premios, las portadas de Alex Ross no se quedaron atrás en cuanto a premios se refiere. 

Así que podéis imaginar mi alegría cuando supe que el sello Vertigo iba a ser el nuevo hogar de Astro City, no decayó mi alegría cuando por fin pude leer “Puertas abiertas” y con este segundo volumen, dedicado a Victoria Alada (la Wonder Woman de Astro City) no puedo sino aplaudir a un Kurt Busiek que bien podría estar tirando de la oreja a TODOS los guionistas de Wonder Woman que olvidan que ésta debería estar haciendo algo, cumpliendo una misión en “el mundo del hombre”, y no sólo yendo a repartir mamporros de un sitio a otro en compañía, o no, de sus compañeros de la JLA. Victoria Alada se muestra aquí como un personaje mucho más completo que el de Wonder Woman, ya que ella sí está luchando por conseguir un mundo mejor para la mujer (y no como pasa con Wonder Woman, a la que muchos guionistas simplemente adjudican el papel de “símbolo para las mujeres”… ¡y se quedan tan anchos!). Así que cuando la reputación de Victoria Alada sea atacada, cuando sus escuelas sean cerradas y cuando las mujeres a las que protege y educa huyan de ella, Victoria Alada se replanteará su lugar en el mundo y su misión con una profundidad que ha llevado a muchos a considerar este arco como un alegato feminista. Echad un vistazo a vuestras librerías y decirme la última vez que se dijo algo parecido de Wonder Woman…por no hablar del resto de superheroinas que pueblan los cómics USA, me sobrarían dedos de la mano para contar las que son algo más que “una tía buena con poca ropa”.

Por si fuera poco Kurt Busiek incide en la especial relación que une al Samaritano y a Victoria Alada, y cómo ambos se compenetran tan bien y se aportan felicidad mutua en una asociación entre iguales (señores guionistas de DC, tomen notas por favor), Y conoceremos un poco mejor al nuevo Confesor, con lo que ya tenemos montada la Trinidad de DC… pero, en muchos aspectos, mejor, ya que Busiek no tiene problemas en hacer envejecer a sus personajes o en reemplazar a alguno, como es el caso del nuevo Confesor.

Después de este tour de force narrativo, que ocupa la mayor parte del tomo, Busiek se despereza un poco dedicando dos números a dos personajes distintos, por un lado a la hechicera suprema de este universo: Erudita de Plata, una historia que parece sencilla pero que es una auténtica maravilla que demuestra que también deberían estar nota los guionistas de Marvel (su “hechicera suprema” le da mil vueltas a cualquier cosa que hayáis leído de Doctor Extraño en los últimos diez años, lo mismo que con Zatanna en DC). Para finalizar tiene tiempo de dedicar un número a un villano que intenta rehabilitarse, una historia en la que el estilo de Graham Nolan nos recuerda más a Fábulas que al trabajo de corte clásico de Brent Anderson, pero aún así, una historia muy interesante que reivindica a los subalternos con estilo.

Como ya hemos dicho Astro City triunfó hasta el 2000 obteniendo gran cantidad de premios, varios de los cuales lo fueron por el colosal trabajo de Alex Ross a la hora de realizar las portadas, no se le puede, ni debe, restar un ápice de mérito a su trabajo, pero lo cierto es que me parece injusto que el trabajo de Brent Anderson pase o desapercibido o vilipendiado, y es que todo el mundo parece olvidar que las portadas no llenan un cómic, y que el éxito de Astro City tiene mucho que ver con el trabajo de un autor de corte clásico como es Anderson que se esfuerza por engrandecer unos guiones fantásticos. He llegado a leer por ahí que las expresiones de sus personajes son muy mejorables, y la verdad es que me pregunto ¿qué cómics está leyendo el que afirma algo así? Estoy bastante seguro de que podemos coger todas las novedades de un mes, comparar el trabajo expresivo de Anderson con el de cualquiera de ellos y que tan sólo un par estarán por encima. Astro City es Busiek, es Ross, pero, también, es Anderson, un autor deudor de la escuela clásica que se merece mucho más reconocimiento del que ha recibido hasta la fecha.

Dicho esto aplaudiré la edición de ECC, por la opción de que sea en cartoné (no me vale para todas las obras, pero desde luego que sí vale para Astro City) y porque se sigan empeñando en incluir artículos en sus títulos.

En definitiva, y por si no os había quedado claro, Astro City ES una de esas series imprescindibles.